Las razones para elegir al abanderado del Tri

Saber tomar un rol dentro de un vestuario, aunque no se sea protagonista dentro de la cancha, la veteranía, autoridad y forma de dirigir en el terreno de juego, además de destacar al encarar partidos importantes, han sido las razones para elegir a los abanderados de la selección mexicana desde el Mundial de 1998 hasta el de Sudáfrica 2010.

Alberto García Aspe para Francia 98 y Corea y Japón 2002, Oswaldo Sánchez para Alemania 2006 y Guillermo Ochoa para Sudáfrica 2010 han sido los elegidos por los entrenadores y sus compañeros para recibir del presidente en turno la bandera nacional. Si bien todos ellos fueron o son futbolistas destacados, especialistas en psicología señalan cuáles son las virtudes y el tipo de liderazgo que manejaban cada uno.

Sobre García Aspe, Octavio Rivas, psicólogo del deporte, quien ha formado parte de cuerpos técnicos de la selección mexicana, explicó que Él se lo ganaba en la cancha, nunca se hacía guaje, hacía todo lo que podía, anotaba y ponía pelotas para gol. Lo futbolístico le dio ese liderazgo y privilegio .

Rumbo a la edición de Francia Beto disputó con el Tri 44 partidos y marcó ocho goles, además de haber alineado en 33 ocasiones y festejado ocho tantos con América en los dos torneos previos al Mundial. Antes de ser el abanderado para la justa de 2002 el mediocampista registró 29 apariciones y dos dianas con México, y 26 duelos con el Puebla, club en el que convirtió en 10 ocasiones.

García Aspe siempre fue un líder acomodador de jugadores en la cancha. Siempre impuso orden y tenía ese don para que sus compañeros lo obedecieran, para ser un mandón , agregó Jesús Estrada Salas, catedrático del Instituto Politécnico Nacional.

Antes de ser elegido como el abanderado para 2006, Oswaldo Sánchez disputó 46 partidos con el Tri que dirigía Ricardo La Volpe, mientras que con Chivas en los dos torneos previos al Mundial apareció en 23 duelos.

En dicha ocasión los seleccionados dejaron antes sus clubes. Sobre el tipo de liderazgo que maneja el arquero, Rivas aseguró que desde la portería solía dirigir con autoridad, y ese carácter le permitió estar en esa posición. En su caso fue más por veteranía .

Guillermo Ochoa, último futbolista mexicano que tuvo ese honor, antes de recibir la bandera alineó 36 partidos en el proceso rumbo a Sudáfrica y en 28 ocasiones con América. El liderazgo de Memo más que futbolístico es como persona. Sabe tratar a la gente y es difícil que le caiga mal a alguien, en general crea una relación armónica de amistad .

Tras ser cuestionados sobre quién debería ser elegido para este día, Estrada Salas explicó que desde su perspectiva hay un alto grado de posibilidades para que Rafael Márquez sea el abanderado. La personalidad de Rafa le gusta al técnico, además de que su trayectoria y los títulos que ha obtenido lo avalan , dijo el especialista, quien agregó que sería benéfica esa decisión porque si el grupo ve que tiene merecimientos no se generan inconformidades .

Por su parte, Rivas, debido a la preparación mental que tuvo con Jesús Ramírez junto al grupo que se coronó en Perú en el Mundial Sub 17, elegiría a Javier Hernández. A pesar de que a veces no juega y lo abuchean él tiene el carácter para convertir las cosas negativas en positivas. Si a eso le dan importancia él podría ser el elegido , concluyó.

El equipo nacional visita hoy el Palacio Nacional para ser abanderado por el presidente Enrique Peña Nieto.