Tigres campeón: la dinastía de oro sigue vigente

Hace menos de seis meses, a mediados de octubre de 2022, el entonces entrenador de Tigres, Miguel Herrera, prendió un incendio alrededor del club al decir que su plantel “se hace viejo para el futbol”. Acompañado de eso vino una espiral de malos resultados que incluyeron el despido de dos directores técnicos más y una eliminación en semifinales de Concachampions.

El panorama era caótico para una institución que se acostumbró a escribir su nombre en letras de oro en la última década. Pero toda esa oscuridad fue borrada al minuto 110 de la final de vuelta del Clausura 2023 ante Chivas en el estadio Akron: Guido Pizarro, el capitán y líder histórico del equipo neoleonés, marcaba el 3-2 para remontar un 0-2 y quedarse con un nuevo título de Liga MX. Así demostraban que la calidad de su plantel aún no ha caducado.

“Nos lo merecíamos, fueron seis meses que no se los deseo a nadie porque empezamos la temporada con todo, luego se va Diego Cocca (primer entrenador de Tigres en el Clausura 2023) a la selección (mexicana), llega Marco Antonio ‘Chima’ Ruiz, no nos salen las cosas, y luego los tamaños de (Robert Dante) Siboldi y su cuerpo técnico para alcanzar esto. Hoy resucitamos y ganamos, recibimos muchas críticas, pero aquí estamos celebrando”, dijo André-Pierre Gignac, líder de goleo histórico de los felinos.

Tigres ganó con autoridad la final del Clausura 2023 y llegó a ocho títulos en la primera división del futbol mexicano, la quinta cifra más alta dentro de un grupo selecto en el que sólo conviven América (13), Chivas (12), Toluca (10), Cruz Azul (9) y León (también con 8); ya está arriba de Pumas y Pachuca, quienes se quedan con 7.

Entre 1982 y 2011, Tigres tuvo una sequía de casi tres décadas sin título de liga. No obstante, el campeonato del Apertura 2011 que lideró Ricardo Ferretti desde el banquillo empujó al club hacia un inédito protagonismo que vino acompañado con otras estrellas en los torneos de Apertura 2015, 2016 y 2017, así como los de Clausura de 2019 y 2023.

André-Pierre Gignac, Nahuel Guzmán y Javier Aquino han sido parte de los últimos cinco títulos del club, empatando a nombres históricos del futbol mexicano como Miguel Marín, Hernán Cristante y Antonio Naelson ‘Sinha’ dentro de la lista de pentacampeones. Guido Pizarro es otro de los referentes de la generación dorada de Tigres con cuatro estrellas, sólo se perdió una entre 2015 y 2023 porque fue transferido al Sevilla de España en ese ínter.

“Independientemente del resultado en turno nosotros siempre tenemos que apuntar a lo máximo, esto se trata de levantarse con humildad y preguntarse qué necesita el equipo y dar lo máximo. Más allá de las individualidades que tenemos siempre que hemos logrado cosas lo hemos hecho en equipo. Tenemos ganas de seguir trascendiendo, esto no me lo imaginaba en 2013 cuando llegué al club, hoy tenemos ganas de que los nuevos chicos quieran seguir ganando”, recalcó Pizarro.

El título se fraguó bajo un guión de víctima para Tigres. Empezó perdiendo 0-2 apenas a los 20 minutos en la final de vuelta, celebrada ante más de 40,000 aficionados de Chivas en el estadio Akron, pero nunca bajó los brazos ni su filosofía de control de balón. Desde los primeros 10 minutos tuvieron más del 60% de posesión y así terminaron los tiempos extras, sólo que con el empuje necesario para transformar ese 0-2 en un 3-2.

La puerta se abrió hasta el minuto 65 por la vía de un penal que concretó Gignac, pero anteriormente Tigres ya había tenido varias oportunidades entre el propio delantero francés, Sebastián Córdova y Luis Quiñones. La anotación se percibía cada vez más cerca.

El penal desconcertó a la defensa de Chivas y al 71’ el estadio se congeló ante el 2-2 marcado por Córdova luego de una combinación de desatenciones entre el defensa Alan Mozo y el portero Miguel Jiménez. El conjunto tapatío intentó despertar hacia la ofensiva con el ingreso de atacantes como Isaac Brizuela y Daniel Ríos, pero ya era demasiado tarde.

Los tiempos extras esperaban y con ellos la moneda en el aire para el equipo que estaba más motivado, que en este caso era Tigres, más con la inspiración de su historia que con el grito de los aficionados.

Chivas buscaba con más corazón que raciocinio alguna oportunidad para volver a tomar la ventaja en el marcador, pero sus ataques desmedidos provocaban que los contragolpes de Tigres fueron los más cercanos a un nuevo gol. Y así ocurrió: un tiro de esquina al 110, cargado de dramatismo porque ya había sido salvado en la línea por Víctor Guzmán, finalmente encontró la red tras un nuevo intento desde la frente de Guido Pizarro. Era el 3-2 con sólo 10 minutos por jugarse y las piernas molidas de tanto desgaste físico y emocional.

Guadalajara perdió su quinta final de primera división y la primera desde el Clausura 2004, quedándose sin posibilidad de igualar al América como los equipos más ganadores de la historia; la diferencia se mantiene en 13-12 con ventaja para las águilas.

Para Tigres fue la oportunidad de ratificar su legado como el absoluto dominador de la Liga MX de 2010 en adelante con seis títulos, el doble que América, León y Santos, su más cercanos perseguidores en ese lapso.

También fue la mejor manera de responder a todos aquellos que tacharon de “viejo” al equipo hace menos de un semestre: “A los que nos quisieron subestimar, a los que hablaron antes de tiempo, les mando un beso muy grande, que sean muy felices, ojalá sigan teniendo oportunidades”, mencionó Nahuel Guzmán en un tono entre alegría y sarcasmo durante las celebraciones por el campeonato del Clausura 2023.