¿Cómo confiar en un asesor inmobiliario? La certificación es el camino, pero sigue como un pendiente en el sector

A pesar de los avances en la tecnología en el sector inmobiliario, la figura de asesor es  y será necesaria en las operaciones de bienes raíces; sin embargo, entre los temas pendientes para la industria está el tema de la regulación y certificación a estos actores.  

Para Grissel Oropeza, gerente de marketing de la plataforma Wiggot, una forma de facilitar el trabajo de los asesores inmobiliarios es mediante la certificación de su trabajo, pero destacó que es un reto todavía contar con autorizaciones oficiales y convencer al sector de los beneficios de registrarse en plataformas y asociaciones.  

Por ello Wiggot, que trabaja en colaboración con la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), busca registrar a sus agentes a través de datos biométricos y tener información que ofrezca garantía en las operaciones de bienes raíces.  

“Todo esto para evitar el coyotaje o asesores falsos y estafas”, puntualizó Oropeza.  

Y es que, al tener un repositorio común de información, tanto asesores inmobiliarios como autoridades tendrían la opción de ver las credenciales del agente, así como las operaciones realizadas, el tiempo que le toman las negociaciones, entre otros indicadores.  

El papel de los agentes  

Si bien actualmente hay plataformas dirigidas al público en general para realizar sus operaciones inmobiliarias, la realidad es que el agente continúa como el principal poseedor de contactos, experiencia y capacidad de condensar la cantidad de propiedades disponibles en la red, de acuerdo con Grissel Oropeza.  

“Creemos que siguen siendo fundamentales para el éxito de esta industria, tan es así que queremos que se vayan formalizando cada vez más”, dijo.  

“Toda la parte legal, está muy regulado, entonces el asesor tiene que actualizarse, que, si salió una nueva ley, que la ley de condóminos, cuál es la nueva regulación del SAT de impuestos al vender una propiedad, todo este trabajo tiene que estar siempre para ofrecer un buen servicio”.  

Incluso, por las nuevas tendencias digitales consolidadas en la pandemia, los asesores deben tener conocimiento sobre tecnología para recorridos digitales y toma de fotografías.  

“Es un trabajo muy amplio, desde saber la parte legal y financiera, hasta saber de diseño de interiores, toma de fotos, tipo de interacción para tener un anuncio más eficiente”, explicó Oropeza.  

Quieren ser la red social de los asesores  

Wiggot es una plataforma digital dirigida a asesores inmobiliarios, en la que es posible compartir su catálogo de propiedades y ver los inmuebles que otros agentes tienen en su portafolio y así establecer contacto.  

“Ya teniendo una plataforma, que también son parte de una asociación, tenemos un filtro de que es una persona confiable, que realmente se dedica a esto”, explicó Oropeza.  

Y es que, todavía el trabajo del asesor inmobiliario requiere práctica de campo, asistir a propiedades, mostrar casas, agendar citas con potenciales compradores, actividades que pueden gestionarse con ayuda de plataformas.  

“Sobre todo con la pandemia se complicó esta parte presencial y surgió el boom de todo lo tecnológico y surgieron los paseos virtuales, fotografías en 360 grados, todas esas tecnologías que queremos ofrecer en Wiggot para dar soluciones al inmobiliario, al bróker”, explicó la directiva.  

Wiggot arrancó en el 2017 en México y actualmente cuenta con cerca de 20,000 asesores registrados en su red, con modalidades que van desde uso gratuito hasta mensualidades de 999 pesos por mes.  

“En las metas estamos muy ambiciosos (…) queremos abarcar a la mayor cantidad de usuarios posibles y que sean activos”, dijo.