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¿Se necesita construir más vivienda para terminar con el rezago habitacional? La mayor parte del déficit está en la calidad de los hogares
Se estima que, en América Latina, más de 43 millones de casas presentan condiciones deficientes de habitabilidad
Uno de los grandes paradigmas respecto al tema de la vivienda en América Latina, es que si se construyen más hogares, se terminaría con el déficit habitacional que hay en la región; sin embargo, para el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el tema no tiene que ver con cantidad, sino con calidad.
De acuerdo con el organismo, uno de los principios fundamentales de la vivienda es que es el principal pilar para la superación de la pobreza, pero muchas veces este rol que tiene no es reconocido como debiera ser.
Sin embargo, este escenario toma relevancia si se considera que en América Latina y el Caribe poco más de 33% de la población vive en estado de pobreza y más de la mitad de los habitantes de la región no tienen acceso a una vivienda digna.
"Consideramos que la solución para acabar con el déficit de vivienda en la región no es únicamente construir más, sino generar las soluciones más adecuadas en unidades existentes que se encuentran en condición de precariedad", destaca el análisis plasmado en el blog del organismo, en un artículo firmado por Matías Lince, consultor en la división de Vivienda y Desarrollo Urbano del BID, y Felipe Vera, especialista de la misma área del organismo multilateral.
Dentro del análisis, se refiere que el déficit de vivienda es el concepto donde la demanda de hogare dignos es superior a su oferta. En este escenario, se destaca que el rezago habitacional puede ser tanto cuantitativo como cualitativo.
"En la región existe un déficit habitacional cuantitativo (ausencia de viviendas) estimado en más de 23 millones de hogares, y un déficit cualitativo (casas en condiciones deficientes) de más de 43 millones de viviendas", apunta el artículo.
Autoproducción, el camino
Para el BID, es fundamental atacar el tema cualitativo, que es ahí donde se concentra la mayor parte del déficit habitacional de la región, por lo que la modalidad de autoproducción asistida puede ayudar a resolver este desafío que se presenta en los distintos países de la zona.
"Este tipo de estrategia se puede llevar adelante de diferentes maneras, pero todas cuentan con un común denominador: un fuerte apoyo económico para la provisión de materiales y, según el caso, mayor o menor acompañamiento técnico y asistencia para la mano de obra", explica el artículo.
Para el BID, este esquema de intervención llegó para quedarse por la cantidad de ventajas que ofrece; sin embargo, es necesario poner en contexto los desafíos para que se pueda replicar y escalar en proporciones significativas.
Ante este escenario, el organismo sugiere tres estrategias que pueden ayudar a reducir el desafío cualitativo de la vivienda mediante la modalidad de autoproducción asistida:
- Desarrollo de herramientas que incorporen inteligencia artificial para todo el ciclo de proyecto.
Los especialistas del BID indican que para que el proceso de autoproducción asistida de vivienda tenga una mayor eficacia, es necesario la implementación de herramientas tecnológicas, que incluyen relevamiento, definición de proyecto, asignación de presupuesto, articulación con proveedores, supervisión de los avances de obra e interacción con población beneficiaria para la resolución de dudas.
- Incorporación de medidas específicas en el diseño de las mejoras para la mitigación y adaptación de los efectos por cambio climático.
Cada vez más, los temas de sustentabilidad juegan un papel preponderante en el desarrollo de políticas públicas, por lo que para los especialistas del BID es importante incorporar mediciones específicas en materia de habitabilidad.
"Para poder llevar esto a cabo, se deben combinar estrategias de diseño pasivas y activas, que consideren las particularidades de cada región climática. Estas inversiones, además de ser costo-eficientes, ayudan a reducir la vulnerabilidad interconectada de los hogares que residen en viviendas deficitarias".
- Promoción de esquemas de recuperación de inversiones.
Para que los esquemas de autoconstrucción asistida tengan un mayor impacto en el combate al déficit habitacional, debe de haber una sostenibilidad económica de los mismos; sin embargo, la informalidad muchas veces impide que esto sea así.
Dentro del análisis, se indica que es necesario promover esquemas de autoconstrucción en los que la recaudación de impuestos quede garantizada a partir de la formalización de los esquemas de adquisición de materiales, por parte de la población beneficiaria.
"Los actores involucrados en la construcción de viviendas debemos tomar cartas en el asunto, actuar con responsabilidad, pensar de forma creativa y colaborar para mejorar vidas de manera efectiva, eficiente y sostenible".