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Ingresos no tributarios tienen su peor caída desde el 2018
En el 2020, el presidente Andrés Manuel López Obrador mandó la propuesta al Congreso para eliminar un total de 109 fideicomisos.
Los ingresos no tributarios, que contemplan la recaudación de derechos, productos, aprovechamientos y contribuciones de mejoras, registraron su peor caída desde el último año de gobierno de Enrique Peña Nieto, de acuerdo con la información de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
En el primer trimestre del año, la recaudación por este concepto captó 91,243 millones de pesos, lo que resultó 16,258 millones de pesos por arriba de lo programado, pero 39.4% menor en comparación con el mismo periodo del 2021. Esto significó 5.3% de los ingresos presupuestarios que captó el erario en el periodo, por un monto de poco más de 1.7 billones de pesos.
Lo anterior supone la caída más fuerte en los ingresos no tributarios, para un primer trimestre del año, desde el 2018, cuando el desplome fue de 83.3% debido a que un año antes el gobierno recibió un remanente de operación, por parte del Banco de México (Banxico), de 321,653 millones de pesos.
En tanto, la caída de estos ingresos en los tres primeros meses de este año se debe, de acuerdo con Hacienda, a que no se han tenido aprovechamientos asociados a fideicomisos como se tuvo en el año previo.
“Los ingresos no tributarios sumaron 91,244 millones de pesos, monto superior respecto a lo aprobado e inferior a lo observado en el primer trimestre del 2021. Esto se explica por la mayor recaudación de derechos respecto a lo previsto en el programa en 29,229 millones de pesos, así como a que este año no se han tenido aprovechamientos asociados a fideicomisos como el año anterior”, explicó Hacienda en su informe trimestral.
En el 2020, el presidente Andrés Manuel López Obrador mandó la propuesta al Congreso para eliminar un total de 109 fideicomisos, cuya extinción suponían un monto de 68,400 millones de pesos en su momento, y por lo cual el año pasado las arcas públicas del gobierno se vieron beneficiadas.
Bajo el argumento de que los recursos de los que hacían uso estos fondos y fideicomisos no eran transparentes y, en varios de ellos se prestaba para la corrupción, el gobierno le dijo adiós a fideicomisos como el Fondo de Desastres Naturales (Fonden), Fondos del Conacyt, fondo para el cambio climático, Fondo Metropolitano, Fideicomiso Fondo de Inversión y Estímulos al Cine (Fidecine), Fondo para el Deporte de Alto Rendimiento, Fondo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, entre otros.
De acuerdo con el gobierno, quienes eran beneficiarios de estos fondos y fideicomisos seguirán siéndolo, prometiendo un uso no discrecional en el destino de los recursos y una agilización de la entrega de los mismos.