Hacienda podría reajustar estimaciones en los pre-criterios generales, coinciden analistas

El miércoles, el Banco de México (Banxico) ajustó a la baja su expectativa del Producto Interno Bruto (PIB) para este año a 2.4% desde 3.2 por ciento. Lo cual impactará las proyecciones de recaudación de ingresos, pues, de acuerdo con el Comité Nacional de Estudios Económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) por cada punto porcentual que México no crezca, se perderán alrededor de 45,000 millones de pesos en ingresos.

“Sin duda se terminará traduciendo en dificultades para cumplir con los objetivos en término de recaudación, pues los ingresos tributarios están a expensas de la actividad económica”, comentó en entrevista James Salazar Salinas, subdirector de análisis económico en CI Banco.

Ante ello, lo más probable es que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) ajuste el marco macroeconómico en los pre-criterios generales de política económica -que se entregan en abril- concordaron especialistas consultados por El Economista.

“Posiblemente hagan ajustes en el crecimiento económico, en el precio de la mezcla mexicana y por ende en los ingresos petroleros y tributarios. Aunque hay que ver cómo va la evolución de las Finanzas Públicas en febrero y marzo”, dijo en entrevista Adrián García Gómez, coordinador de ingresos e impuestos del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP). 

Cabe recordar que en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2022, se estimó que la mezcla mexicana cueste en 55.1 dólares por barril. Sin embargo, la cifra ha sido superada en los últimos días provocados por la intervención rusa a Ucrania. Ayer, la mezcla mexicana de exportación superó los 105 dólares.

Además, por cada dólar extra que cotice la mezcla mexicana representaría 13,588 millones de pesos adicionales a lo proyectado por la SHCP.

Las realidades de los ingresos tributarios y los petroleros contrastan

Los datos del Informe de Finanzas Públicas proporcionados por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público mostró un panorama “complicado” en los ingresos tributarios, pues, se tuvo una recaudación de 379,838 millones de pesos, a enero. 

Esto representó una caída de 0.2% anual real. En este sentido, destacaron las caídas anuales del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) de 9.2 y 23.9%, respectivamente.

La caída de los ingresos tributarios reflejan el inicio de un año complicado en términos económicos. Gran parte de los ingresos tributarios tienen que ver con el dinamismo de la actividad económica del país y con base en ello se da una recaudación robusta o débil”, dijo Salazar Salinas.

El ejecutivo del banco recordó que en el caso del IEPS, en particular con el IEPS a gasolinas y diésel, está bajo la presión de los precios internacionales del petróleo (provocado por el conflicto militar en Ucrania).

“El compromiso del gobierno federal de que la gasolina no tenga incrementos por arriba de la inflación ha generado que el estímulo fiscal por parte del gobierno se incremente y por ello se deje de recaudar”, comentó Salazar Salinas.

El IEPS a gasolinas y diésel tuvo una disminución anual de 56.3%, es decir sólo se recaudaron 11,315 millones de pesos, durante enero.

“En febrero el precio del petróleo estuvo más alto que enero, quizá los ingresos petroleros tengan una recaudación aún mayor comparado con lo tenía estimado la SHCP. (Aunque) es muy volátil el precio del petróleo, pero como se ve el panorama se vislumbra que los precios seguirán altos en el corto plazo”, comentó García Gómez.