Lectura 3:00 min
Importaciones mexicanas de bienes de capital crecieron 21.9% entre enero y octubre
El valor de estas compras externas que realizó nuestro país ascendió a 47,875 millones de dólares, un récord; herramientas, maquinaria, vehículos, ordenadores y equipos de construcción son algunos ejemplos.
Las importaciones mexicanas de bienes de capital crecieron a una tasa interanual de 21.9% de enero a octubre de 2023, a 47,875 millones de dólares, de acuerdo con datos del Banco de México.
Además de que la cifra refleja un récord, se alcanzó con 32 meses seguidos de crecimientos interanuales a doble dígito, desde marzo de 2021.
También la tendencia se ha mantenido relativamente estable en los primeros 10 meses del año actual, con la menor de las alzas en abril, de 17.3 por ciento.
Una parte de la explicación de la llegada de estos bienes está en la relocalización (nearshoring), que es una estrategia empresarial que implica la transferencia de algunas o todas las operaciones de una empresa a un país cercano.
La estrategia ofrece varios beneficios, incluidos ahorros de costos, zonas horarias similares y similitudes culturales. Además, mitiga algunos de los riesgos asociados con la deslocalización, como las complejidades de comunicación y logística.
Los bienes de capital son artículos duraderos fabricados por el hombre que las empresas utilizan para producir bienes y servicios. Herramientas, maquinaria, edificios, vehículos, ordenadores y equipos de construcción son tipos de bienes de capital. Un aumento de los pedidos y envíos de bienes de capital es señal de que las empresas esperan más demanda y de que la economía crecerá.
Principalmente, los impactos de la relocalización son percibidos en el sector manufacturero, en particular en actividades integradas en cadenas globales de valor.
La proporción de empresas que perciben haber sido beneficiadas por este factor en esas actividades fue de 18.1%, superior al porcentaje en el resto de manufacturas o en el sector no manufacturero (4.2% y 8.0%, respectivamente), según la Encuesta Mensual de Actividad Económica Regional (EMAER) levantada en julio pasado.
Durante los últimos años las empresas han enfrentado múltiples choques, un entorno cambiante e incierto y condiciones extremadamente inusuales que continúan siendo vigentes y afectando las condiciones de demanda. Al mismo tiempo, según un análisis del Banco de México, diversos factores han incentivado una reconfiguración de las cadenas globales de producción que podría favorecer a México a través de la reubicación de la producción hacia el país.
Identificar este fenómeno es complejo dado que es difícil distinguir las tendencias temporales que responden a circunstancias coyunturales que se espera que se reviertan, de los cambios estructurales que se esperaría que se profundicen con el tiempo”, dijo el Banco de México.
El comercio de bienes y servicios entre Estados Unidos y México ascendió a 863,400 millones de dólares en 2022.
Durante ese año, las exportaciones estadounidenses a México totalizaron 362,700 millones de dólares y las importaciones de México ascendieron a 500,700 millones. Este gran volumen de comercio sustenta directa e indirectamente millones de puestos de trabajo en ambas naciones. De enero a septiembre, México se consolidó como el primer socio comercial de Estados Unidos, con una participación de 15.7% en el total de intercambios estadounidenses de mercancías con el mundo.