Llevan Luces de Esperanza a comunidades remotas

En el país aún existen más de 1.5 millones de personas que no cuentan con energía eléctrica en sus viviendas, de éstas, entre 30 y 40% son familias que se encuentran en zonas de difícil acceso y donde la extensión entre viviendas puede ser de hasta 3 kilómetros, de acuerdo con cifras del Inegi 2020.

Una de las comunidades con las características anteriores se encuentra en el municipio de San Juan Guichicovi, en Oaxaca, ubicado en la zona norte del istmo de Tehuantepec, conocida como Río del Sol, donde las personas mayores que habitan la localidad son hablantes de la lengua mixe y desde que nacieron, prácticamente han vivido sin energía eléctrica en sus hogares.

De acuerdo con lo anterior y en línea con su estrategia de sostenibilidad, la empresa Iberdrola, en alianza con Iluméxico, formaron una alianza bajo el nombre de Luces de Esperanza, desde 2019 con el objetivo de generar oportunidades de desarorllo y mejorar las condiciones de vida de habitantes en zonas remotas del país.

Luces de Esperanza llegó a Río del Sol en agosto del año pasado, “derivado de un análisis de impacto social detectamos esta comunidad sin acceso a energía eléctrica donde viven alrededor de 60, 70 familias que viven en situación de pobreza y vulnerabilidad, por lo que de la mano de Iberdrola se instalaron sistemas solares aislados como proyecto sostenible en el tiempo”, comentó Marisol del Campo Martínez, Directora Comercial de Iluméxico.

Los paneles solares instalados en las viviendas de Río del Sol captan la energía solar y la almacenan en una batería, que se ubica en un gabinete al interior de la vivienda y de donde se desprende la instalación de contactos y focos, necesarios para la utilización de los habitantes, cada Sistema solar brinda 1.5 kw horas al día.

Rosalino Isidro Guillermo, de 67 años y  Elvia Leonardo Bartolo, de 68 años, son una pareja que ha vivido en Río del Sol desde su nacimiento y se dedican a la agricultura, siembran jitomate, calabaza, chayote, entre otros vegetales que utilizan para su consumo y para la venta en el poblado más próximo, El Zacatal.  

Rosalino y Elvia, disfrutan más el día desde que tienen luz en su vivienda, platican hasta ya entrada la noche y conviven con sus vecinos que también ya cuentan con luz en sus hogares.

Otro caso es el de Abraham Ramírez María y Georgina Beltrán Bautista, de 65 y 64 años, respectivamente, quienes al igual que Rosalino y Elvia han pasado toda su vida en Río del Sol, en la casita de adobe que ahora cuenta con energía eléctrica y donde tienen una pequeña televisión con DVD para escuchar música y ver películas.

Georgina se levanta a las 3:00 de la mañana a moler maíz y antes de contar con un foco adaptó una lámpara de pilas con un elástico que ponía sobre su cabeza para iluminar el espacio donde realizaba sus labores, ahora cambiaron las lámparas de baterías por lámparas recargables y aseguran que han ahorrado el dinero que destinaban a las pilas para otros gastos propios de la casa.

Los paneles solares son revisados por Iluméxico cada seis meses de manera física para revisar o evitar algún problema, pero además son monitoreados por si se detecta algún mal funcionamiento para acudir a repararlo, pues cabe destacar que también dan empleo a personas de la comunidad interesadas en brindar soporte para los sistemas.

Iberdrola cuenta con cuatro parques eólicos en la zona del Istmo de Tehuantepec con 301 MW de capacidad instalada y especificamente con Luces de Esperanza han invertido alrededor de 40 millones de pesos y esperan llegar a más comunidades que lo requieran.