México tiene gran riesgo de perder caso de maíz transgénico: ICC

Al solicitar que se derogue la decisión gubernamental, la Cámara de Comercio Internacional (ICC) advirtió al presidente Andrés Manuel López Obrador que la disputa por el maíz genéticamente modificado podría afectar la balanza comercial agroalimentaria de México, revirtiendo el superávit que presenta.

Ante la falta de evidencias científicas, México enfrenta “el riesgo de perder paneles de resolución de controversias y, con ello, el gran impulso al superávit comercial en el sector agroalimentario que el año pasado superó los 15,000 millones de dólares”, sostuvo la International Chamber of Commerce México (ICC México).

El organismo internacional consideró que, debido a los sólidos planteamientos presentados por Estados Unidos y Canadá en relación a la falta de evidencia científica que respalde la prohibición del uso de maíz genéticamente, México podría verse impactado de manera negativa.

En este sentido, la ICC México sugiere al gobierno mexicano que, durante las consultas, “evalúe de manera seria y detenida la derogación de este decreto, cuyo sustento jurídico no ha sido evidenciado”.

En caso de no hacerlo así, advirtió, esta disputa debería resolverse a través de un panel internacional, lo que podría resultar en la imposición de restricciones a las exportaciones de México hacia los Estados Unidos y Canadá.

Recordó que la disputa del maíz transgénico tiene su origen en un primer decreto emitido el 31 de diciembre de 2020, el cual restringió el uso de maíz genéticamente modificado en todo tipo de alimentos para consumo humano. Posteriormente, se pretendió acotar esta medida mediante un segundo decreto publicado el 13 de febrero de 2023, el cual aclara que el uso del maíz modificado genéticamente se restringe inmediatamente para la alimentación humana mediante nixtamalización o la elaboración de harina, y de manera gradual para su uso industrial en la producción de productos destinados a la alimentación humana y animal.

Ante esta precisión, el gobierno de los Estados Unidos decidió recurrir a las consultas previstas en el Tratado de Libe Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) el pasado 2 de junio, bajo la premisa de que las medidas del gobierno de México carecen de respaldo científico y podrían perturbar innecesariamente el comercio norteamericano. El 9 de junio, Canadá se unió al proceso consultivo bajo premisas similares.

No obstante, el gobierno de México debe aprovechar que el T-MEC le impide a los Estados Unidos y a Canadá imponer restricciones unilaterales a las exportaciones mexicanas, debiendo someter cualquier disputa, primero, al procedimiento consultivo, abriendo la posibilidad de resolverla cuanto antes y de manera amistosa, recomendó el organismo internacional.