Movistar valora ir en dueto con Tigo por el primer espectro 5G de Colombia

Telefónica Movistar y Tigo de Millicom International Cellular cumplen sesenta días de haber firmado un acuerdo de compartición de infraestructura en Colombia, uno de los mercados más complicados de América Latina para hacer negocio de telecomunicaciones, porque el país presenta las segundas tarifas más caras del continente —el primero es México— por uso de espectro y el consumo promedio mensual por usuario o ARPU más bajo de toda la región, más una economía con inflación del 13% y las asimetrías de mercado por la existencia de un actor que concentra el 65% del negocio de datos.

Hasta hace un lustro, Colombia era una auténtica joya para el grupo Telefónica por la posibilidad que tenía y tiene todavía la compañía de comercializar múltiples combos de productos de telecomunicaciones allí. Sin embargo, un entramado regulatorio difícil de seguir, la aparición de un nuevo actor como es Wom que presiona la competencia con precios más bajos y la madurez del mismo mercado colombiano, hicieron que la operación de Movistar perdiera casi el 10% de todos sus ingresos generales sólo en el primer semestre del año.

Ese contexto animó a Telefónica a aliarse con Tigo para sacarle mayor provecho a la capacidad de su infraestructura y entonces ambas compañías formalizaron la llamada “Red Única” con la que unidas avanzan con los despliegues de red 4G-LTE por toda Colombia y con prestación de servicios para 35 millones de personas.

Telefónica y Tigo exploran ahora la ventaja que supondría comprar juntas bandas radioeléctricas para desarrollar redes de quinta generación, ante la primera subasta de 5G que el Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicaciones de Colombia (Mintic) ya bosqueja con primeras definiciones para el día 15 de este mes.

Si Tigo y Movistar lo consiguen, ambas compañías estarán unidas para maximizar su músculo financiero en el despliegue de 5G y enfrentar con mejores oportunidades al incumbente Claro de América Móvil que en prensa se ha encargado de desacreditar a la Red Única, estima en esta entrevista la directora de política regulatoria de Telefónica Movistar Colombia, Natalia Guerra.

—En México se perciben dos acepciones respecto a esta “Red Única”. Una dice que es una combinación de activos para crear una nueva compañía y otra que es una suerte de lo mismo que Movistar firmó con AT&T en 2019 para el caso de su operación mexicana. ¿Qué es entonces la Red Única de Tigo con Movistar?

—Esta es una oportunidad para aclarar la figura que nosotros tenemos proyectada y que fue la que presentamos a la autoridad de competencia. Se trata de profundizar el nivel de compartición en la red de acceso, en la porción que tiene que ver con la infraestructura pasiva y activa, como los elementos de la estación base y la compartición del espectro.

Esto es en cuanto a lo que tiene que ver con la red de acceso. El resto de los componentes de la red, o sea el color de marca y plataformas de atención y gestión de clientes, todo eso se mantiene independiente y cada operador sigue funcionando de esa manera.

Estamos de manera totalmente independiente, tanto frente a los clientes minoristas como a los clientes mayoristas. Las dos marcas y las dos compañías, por supuesto, se mantienen independientes una de otra.

—Lo que cuenta usted tiene algunas similitudes con lo que Movistar hizo con AT&T en México en compartición de infraestructura… ¿Pudieron haberse inspirado un poco en esa experiencia después de notar los primeros beneficios de dicha estrategia iniciada en 2019?

—Lo que nosotros buscamos con esta red de acceso, y digo profundización, es porque cuando se hizo la subasta del año 2013, Tigo y Telefónica hicieron un acuerdo para poder hacer el despliegue de la red de 4G. En ese momento compramos, cada una por separado, espectro en la en el en la banda de AWS.

Y los que hicimos fue un acuerdo para dividirnos el país en zonas para hacer el despliegue y compartiendo, digamos, costos de todos los elementos de la infraestructura pasiva. En ese momento no, no hicimos acuerdo de compartición de espectro.

¿Entonces tiene, digamos, esta diferencia frente al resto de operaciones que mencionabas? Sí, obviamente son unos activos de tanto de las redes de 3G y 4G y pues lo que aspiramos es que también seamos ganadores o signatarios de la subasta de 5G para poder también hacer despliegue de la red 5G.

—¿Este acuerdo abre entonces la posibilidad real de que Telefónica y Tigo hagan una puja, a modo de consorcio, por lotes de frecuencias para servicios 5G ante la enorme carga fiscal que impone el Estado colombiano por el espectro?

—Claro. Este es el interés y se explora esa opción y pues todo depende de las condiciones definitivas que tenga el proceso de la subasta. El Mintic ya publicó las condiciones básicas para comentarios que se vencen el 15 de agosto y allí se está permitiendo las figuras asociativas. Si así lo determina, pueden presentarse los consorcios y uniones temporales. Lo estamos explorando.

Nosotros estamos revisando las condiciones, pero pues lo cierto es que ahí ya se permiten esas figuras y nuestro proyecto sí contempla revisar de qué manera podemos hacer despliegues conjuntos de todas las tecnologías.

Sí, tenemos previsto explorar, digamos, esa opción. Hoy, nosotros tenemos previsto dentro de nuestro acuerdo poder compartir el despliegue de 5G.

—A reserva de que le pregunte lo mismo a Tigo, ¿los ven animados a ellos de competir por bandas 5G de esta manera?

—Estamos trabajando en este proyecto de Red Única y ese ya es un habilitador como para poder pensar ellos y nosotros en ese tipo de decisiones…

—¿Qué factor determinaría que Movistar anime a Tigo a ir juntos por el espectro 5G en un país con las bandas más caras de Sudamérica y con una inflación anual del 13%?

—El factor precio es el determinante para poder participar en la subasta y poder adquirir espectro de tal o cual manera. El Mintic está por definir las condiciones, precio y obligaciones en subasta y renovación de concesiones. El Ministerio tiene en sus manos tanto las renovaciones de espectro que se vencen este año, como las que concesiones que se van a entregar. A nosotros se nos vence este año las concesiones de espectro AWS y a Tigo también, y el año que entra la banda de 850 MHz. El Ministerio tiene que definir y las condiciones también para 5G.

El Mintic ha dicho que el 1 de septiembre va a definir qué condiciones de precio y obligaciones fijaría. ¿Por qué es nuestra inquietud sobre ese tema? Colombia ha venido fijando unos precios muy altos para las renovaciones de espectro y para la subasta de espectro, entonces, pues se siguió por el camino de tener un criterio fiscalista.

—En México corre un viento de que el Estado ahora sí bajará los precios del espectro y el regulador IFT está excitado porque así ocurra; de hecho, habría noticias la próxima semana... ¿No cree que una brisa de esos vientos refresque a Colombia?

—Coincidimos en que debería abandonarse ese criterio fiscalista. Estudios de la propia Telefónica, la GSMA, la Asotic y de la Universidad Nacional de Colombia han coincidido en que los precios del espectro deben bajar. Hay ahora un criterio de maximización del bienestar social que está definido en la ley, que es para aumentar la cobertura, para cerrar la brecha digital y para mejorar la calidad y quita el criterio fiscalista.

Los precios del espectro aquí están muy fuera de los benchmark internacionales y en algunos casos tres veces por encima de los precios de los benchmark a nivel regional. Esas condiciones son determinantes para entender qué pasos se siguen y qué pasos siguen, y pues estamos a la espera de que el Ministerio las defina.

—Por nerviosismo o por recelo, a Claro de América Móvil no le gusta este plan de Red Única de Tigo con Telefónica. ¿Por qué sería?

—Nosotros esperamos lograr con este modelo el aseguramiento de unos menores costos en los despliegues; estamos aquí por hacer eficiencia y asegurar mayores inversiones, haciéndolas de forma sostenible. Esta es y será una infraestructura que podrá ser aprovechada en conjunto por ambos operadores y nos permitirá seguir continuando en el mercado disputando los clientes y crecer.

La situación en Colombia… en particular tenemos un mercado con una falla estructural, pues tenemos un operador dominante y ya declarado por el regulador, y lo declaró así desde el año 2012 en voz móvil y lo volvió a declarar en el 2021, pero ahora incluyendo voz y datos. Pero, desafortunadamente, el regulador no ha tomado las medidas específicas y ha venido tomando una serie de medidas generales, que digamos, reducir costos de interconexión o aceleran la portabilidad numérica pasándola de tres días a un día y elimina los bloqueos de los terminales y estableció cargos de roaming más bajos y digamos, eso fue propicio para la entrada de Wom a Colombia.

Desafortunadamente, esas medidas son todavía insuficientes frente a la situación de competencia que se presenta en el mercado y nosotros tenemos entonces un operador que tiene casi el 47% del mercado móvil completo. Ellos ya tienen el 65% de los ingresos del mercado de datos.

Entonces, vemos que para poder imprimir una mayor dinámica de competencia tenemos que asegurar las inversiones y esa es nuestra manera con la Red Única, con más inversiones, mejor calidad de red y mejor capacidad de red, para competir contra un operador como es Claro en Colombia. Nosotros estamos haciendo todo dentro de las reglas, como debe ser.