Importación de carne y alza en costos de producción presionan a porcicultores

Querétaro, Qro. El constante aumento en los costos de producción, así como la importación de carne, son componentes que presionan a los productores pecuarios, afectando principalmente a los porcicultores, sector que atraviesa por una situación crítica, planteó el presidente de la Unión Ganadera Regional de Querétaro (UGRQ), Alejandro Ugalde Tinoco.

Esta problemática se profundiza ante la disparidad que hay entre los costos de producción y los precios en que se comercializa el ganado; mientras a los porcicultores se les paga a entre 29 y 30 pesos el kilogramo de porcino, el costo de producción ronda en 38 pesos el kilo y el precio al público ronda en 130 pesos.  

Por tanto, el sector pugna porque se establezca un organismo regulador de precios, en el que tengan injerencia las dependencias federales, para reducir la brecha que persiste entre el pago que recibe el productor y el precio final del producto.

Desde hace aproximadamente cinco años -expuso- los ganaderos han padecido un constante aumento en los costos de producción, presionados en gran medida por las alzas en insumos como las oleaginosas, pues tan sólo la pasta de soya ronda en 12,000 pesos la tonelada, un alza de 60% respecto a los 7,500 pesos que pagaban cuatro o cinco años atrás.

Aunque los precios de los granos sí han disminuido, la reducción anual es de apenas 6.2%, debido a que en la actualidad una tonelada cuesta cerca de 7,500 pesos, mientras el año pasado rondaba en 8,000 pesos.

“Todos los productores pecuarios necesitamos estos insumos para poder generar nuestro producto. (…) Hoy pega mucho en los cerdos. Hoy (miércoles) habrá una manifestación masiva afuera de la Secretaría de Economía, en la Ciudad de México, donde queremos exponer precisamente el golpeteo que están haciendo contra la producción porcina en el país, la están devastando”, acotó.

Los productores pecuarios reportan en promedio un incremento de 40 a 45% en los costos de producción, respecto al 2019. En ese año prepandemia, agregó, los porcicultores vendían el kilo de carne entre 32 y 33 pesos, superior a los 29 pesos actuales.

A este entorno se suma el impacto que está generando en los productores mexicanos la importación de carne, principalmente de Brasil y de Argentina, y que -dijo- está ingresando al país para venderse a bajo costo.

Las importaciones de carne de porcino, resaltó, están generando que la oferta supere a la demanda, derivando en una disputa entre los productores por colocar su mercancía.

“En México somos deficitarios en producción de carne de porcino, pero nosotros podemos dar por lo menos 55 a 60% (de la demanda), pero está entrando más del 60% de los cárnicos, esto es lo que está desfasando, hay más oferta que la demanda que está teniendo el producto, estamos peleándonos aquí los productores con un precio que va muy por debajo del costo de producción”, añadió.

Frente a este panorama, se prevé que unidades de producción comiencen a cerrar debido a la falta de liquidez que están padeciendo.

“Todo esto lo está absorbiendo el productor y lo más seguro es que vayamos a empezar a ver granjas que empiecen a cerrar por falta de liquidez y pérdidas que están teniendo”, pronunció.

El presidente de la UGRQ especificó que los porcicultores están en la situación más crítica, aunque hay otros sectores que también reportan caídas en su margen de utilidad.  

En el primer bimestre del año, Querétaro produjo 4,575.9 toneladas de cerdo, en carne de canal, colocándose como el noveno productor; los diez principales productores son Jalisco, Sonora, Puebla, Yucatán, Veracruz, Guanajuato, Michoacán, Chiapas, Querétaro y San Luis Potosí, de acuerdo con información de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).

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