Obesidad, un problema perrón

Ramona sufre de sobrepeso: le duelen las articulaciones, se cansa al caminar, respira con dificultad y es propensa a padecer diabetes. Sus amos la llevaron al veterinario, quien les recomendó ejercitarla y darle un alimento de dieta.

Al igual que esta perrita schnauzer, muchos canes están obesos debido la crisis: sus dueños decidieron darle alimento más barato, pero de menor calidad.

La preocupación por la salud de las mascotas ha creado un gran mercado para su cuidado, desde alimentos divididos por edad, raza, actividad o peso, hasta medicamentos para procurar su bienestar.

Se calcula que de 1,500 a 3,000 pesos se gasta el dueño de un perro de raza pequeña o mediana anualmente sólo en su alimentación. Además, este costo sube si su mascota sufre de alguna enfermedad.

Por ejemplo, para tratar la obesidad los papás de Ramona deberán comprar croquetas light, que son más costosas que las convencionales.

Por ejemplo, una bolsa de 7 kilos de alimento de dieta les costará 750 pesos, mientras que un alimento normal, de buena marca, en la misma presentación, cuesta entre 550 y 600 pesos. Esto significa una diferencia de aproximadamente 35 por ciento

Una enfermedad frecuente

La gordura es uno de los problemas más frecuentes en los canes: en México, 40% de los perros sufre de sobrepeso y 20% son obesos.

Un perro tiene sobrepeso si tiene 20% más de su peso normal y es obesidad si alcanza 30% , explicó Jesús Villalobos Gómez, director del Hospital Veterinario de Especialidades del Valle.

Las razas más propensas a padecerla son el golden retriever, el cocker spaniel, schnauzer miniatura, el salchicha y el Chihuahua.

Explica que los canes obesos son propensos a sufrir problemas cardiopulmonares, diabetes, osteoartritis, reproductivos, algunos tipos de cáncer y tienen mayores riesgos durante las intervenciones quirúrgicas.

Además, su esperanza de vida disminuye una tercera parte.

Las causas y su prevención

La obesidad en perros se da por las mimas causas que en los humanos: sedentarismo y mala alimentación; en ambos casos, la mejor medicina es la prevención.

El ejercicio mejorará la salud de su mascota y evitará comportamientos viciosos como destruir objetos.

También es importante darle la alimentación adecuada. En el mercado hay comida específica que puede mejorar su calidad de vida sin engordarlos.

El último paso sería la medicación. Un medicamento es Slentrol, que envía una señal de saciedad al hipotálamo para que el perro deje de comer.

Calculamos que tres de cada 10 perros que se ven en la calle están desparasitados, vacunados o llevan a cabo un tratamiento médico , dice Roberto Vargas, responsable de Mercadotecnia de Salud Animal en Pfizer.

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