Rusia levanta suspensión de venta de misiles a Irán

Moscú. El presidente ruso Vladimir Putin abrió el camino para que Rusia entregue un sofisticado sistema de defensa misil a Irán, una decisión que podría incrementar de forma importante la capacidad militar de la República islámica.

La decisión fue de inmediato bien recibida por Teherán, pero preocupó a Israel, que lo ve como una señal de que Irán ha comenzado a sacar provecho del acuerdo nuclear alcanzado con potencias mundiales y que se espera sea finalizado para junio.

El secretario de Estado norteamericano John Kerry objetó la decisión de Moscú en una llamada telefónica al ministro de Exteriores ruso Serguei Lavrov, y la Casa Blanca indicó que la medida podría amenazar los planes para levantar las sanciones que pesan sobre Irán como parte del acuerdo.

Rusia firmó un contrato para vender a Irán el sistema de misiles para defensa S-300 en el 2007, por 800 millones de dólares, pero más tarde suspendió su entrega debido a las fuertes objeciones de EU e Israel. El lunes, Putin eliminó la prohibición.

Rusia insiste en que la decisión del 2010 de congelar la entrega de los misiles se basó en las sanciones que el Consejo de Seguridad de la ONU impuso a Teherán por su programa nuclear.

El acuerdo preliminar de Irán con seis potencias mundiales busca acotar de forma importante su capacidad para producir un arma nuclear a cambio de la flexibilización de sanciones internacionales. Se espera que haya un pacto final para el 30 de junio.

El sistema de misiles para defensa S-300, que tiene un rango de alcance de hasta 200 kilómetros y la capacidad de rastrear y alcanzar varios objetivos al mismo tiempo, es una de las armas de defensa aérea más poderosas del mundo. Si se despliega en grande, el sistema podría ser un fuerte escudo contra cualquier ataque aéreo.