Zappadu, con más miedo a Berlusconi que a la guerrilla

Bogotá.- El fotógrafo Antonello Zappadu, autor de las imágenes de invitados del primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, en la mansión que posee en Cerdeña, aseguró hoy que teme más al jefe del Ejecutivo de Italia que a la guerrilla colombiana.

"Yo tengo más miedo de Beslusconi que de la guerrilla (colombiana)", señaló Zappadu a la emisora colombiana Caracol Radio en una entrevista telefónica desde Italia, mientras conducía su coche.

De 51 años y casado desde hace cuatro con una colombiana, con la que tiene dos hijos, dijo ser "un reportero gráfico" y no "un paparazzi", y que hace tres años sigue a Berlusconi.

Hablando un poco en español y otro en italiano, Zappadu indicó que las fotos publicadas el jueves por el diario español El País son el producto de un trabajo que le llevó años y del cual tiene más de 250 imágenes.

El reportero aseguró que con las fotografías quiere mostrar cómo Berlusconi usa fondos y aviones de la Fuerza Aérea de Italia para asuntos privados como el transporte de invitados personales a su mansión de Cerdeña, Villa Certosa, donde fueron tomadas las fotografías.

Zappadu indicó que le fue muy difícil seguir a Berlusconi y que le pudo tomar muchas instantáneas en varias de sus fiestas, en muchas de las cuales "aparece gente desnuda".

Denunció que en Italia hay problemas a la libertad de prensa ya que "ahora no se puede tomar fotos a nada porque Berlusconi ha creado muchos obstáculos a la prensa italiana".

Agregó que, como fotógrafo, ha cubierto informaciones en varios países entre ellos China, Ecuador y Colombia, en este último en temas relacionados con el conflicto armado.

Además, su esposa es de la ciudad colombiana de Cali (suroeste).

El fotógrafo italiano indicó que de momento trabaja en su país, en donde el gremio periodístico le ha dado voces de aliento, pero hacia finales de año podría estar nuevamente en la nación suramericana.

Tras la publicación de las fotos, en las que aparecen varias personas, entre ellas varias mujeres semidesnudas, en Villa Certosa, Berlusconi aseguró que "no hay ningún escándalo" en ellas, pero que suponen "una violación de la intimidad y una agresión escandalosa", pues fueron tomadas en su residencia particular de Cerdeña.

En Italia, relajados

Los italianos viven de forma relajada los supuestos escándalos que rodean al primer ministro, Silvio Berlusconi, y algunos hasta con disgusto el hecho de que se aireen fotografías de la vida privada del magnate en medios internacionales "porque concierne al ámbito de su intimidad".

Así lo sostiene Alessandro Cerruti, empresario de 58 años, que acaba de depositar su voto para las elecciones europeas, y comenta a Efe que el caso Noemi y el asunto de los amigos y amigas asiduos a fiestas en Villa Certosa (Cerdeña), la residencia de Silvio Berlusconi, es parecido a lo que ocurrió con el ex presidente de Estados Unidos Bill Clinton y la becaria Mónica Lewinsky.

"Es como lo que pasó con el escándalo sexual de Clinton y entonces no fue tanto por lo que ocurrió si no porque el presidente había mentido, pero se trataba de la mentalidad puritana de EU".

"Aquí en Italia no importa ni lo que ocurra, ni tampoco que se mienta porque el país está acostumbrado a ello", refiere.

Sin embargo, para Ettore Finicalchi, periodista de 43 años, es cuando menos "interesante" el hecho de que un jefe de Gobierno que defiende los valores de la familia en su programa político, "invite después a 40 chicas para que se queden desnudas frente al mar".

Además, sostiene que se está hablando de un jefe de Gobierno "cuya privacidad no es la misma que la del resto de los ciudadanos".

A Finicalchi le resulta también "grave" que Berlusconi "mienta" porque no ha dado hasta ahora una versión única de cómo conoció a Noemi Letizia, de 18 años y desencadenante de su divorcio, ni a sus padres.

Raffaella Metallo, profesora de 37 años, no vota a Berlusconi porque no le gusta como persona y "como político debe cuidar su imagen", aunque las fotografías publicadas por el diario español "El País" en las que aparecen chicas semi-desnudas no le parecen "escandalosas como mujer que soy".

Fabrizio P. de 36 años, es camarero de un restaurante de Piazza Navona y se declara de izquierdas, pero asegura que cree que "Berlusconi puede hacer lo que quiera".

A Paolo Grasso, abogado de 48 años, le molesta el modelo de campaña electoral para las elecciones al Parlamento Europeo "que hemos vivido".

Y hace alusión a la fotografía del diario "El País" de las chicas y del desnudo del ex primer ministro checo Mirek Topolanek.

"Me parece una falta de respeto hacia la República Checa porque no consigo entender qué tiene que ver el ex primer ministro checo con la política italiana y con lo que hace Berlusconi en su casa".

De las supuestas relaciones con las chicas que aparecen en las fotos, Grasso afirma: "Se trata de historias privadas del señor Berlusconi. Él se va con jovencitas y ellas saben que se van con un ancianito".

"Además, después de haber luchado por la independencia de la mujer ahora parece que volvemos a la era victoriana donde unas cosas están permitidas y otras prohibidas", agrega.

"No sé qué tiene que ver esto con lo que haremos en las elecciones europeas. Todo esto muestra el vacío de la oposición que no tiene argumentos ni políticos ni económicos", dice.

Para Alberto De Marchis, piloto jubilado de 74 años, si Berlusconi se va "con cinco chicas no creo que esto sea prioritario. Hay que discutir sobre cosas importantes no sobre programas como 'Gran Hermano' o 'La Isla de los Famosos' porque así no se gobierna una nación".

Todo ello, según De Marchis, podría hacer aumentar los votos a Berlusconi en las resultados de las elecciones europeas.

En consecuencia -añade- "yo me pregunto: ¿Si todo esto importa un bledo a un italiano qué le puede interesar a un español?", en referencia a la amplia repercusión que han tenido en España las fotografías de Berlusconi.

"Estoy disgustado -comenta-, no puede ser que Italia haya producido a un Maquiavelo y toda la gran de política del papado y estemos hablando ahora de chiquillas que van o no a casa del primer ministro".

"Hemos creado una civilización que ha durado siglos y las hemos visto peores en Italia por ejemplo, con la familia Borgia" e inquiere: "¿De qué nos escandalizamos ahora?".

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