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Posible acuerdo con bonistas eleva 40% los títulos en default
Desde que los fondos buitre ganaron el juicio contra Argentina, sigilosa pero en forma creciente, aparecieron los compradores de bonos en default. Y desde el giro del Gobierno hacia una postura negociadora el viernes pasado, los títulos argentinos impagos subieron alrededor de 20 dólares.
Desde que los fondos buitre ganaron el juicio contra Argentina, sigilosa pero en forma creciente, aparecieron los compradores de bonos en default. Y desde el giro del Gobierno hacia una postura negociadora el viernes pasado, los títulos argentinos impagos subieron alrededor de 20 dólares, al incorporar la posibilidad de que los acreedores se beneficien del trato que cierren los holdouts ganadores del juicio.
Según datos de Bloomberg, los bonos pasaron a cotizar por encima de 50 dólares desde que la Corte Suprema rechazó el juicio, escalaron entre 10 y 15 dólares el viernes pasado tras el discurso presidencial y otros cinco ayer con el rumor de que un banco de inversión estaría armando un comité de acreedores que no fueron litigantes.
?Hay muchísima demanda por esos untenders?, dijo Alejo Costa, jefe de Estrategia de Puente. ?A partir del fallo hay mucha gente que quiere comprar la mayor cantidad posible para obtener un arreglo similar en el comité?.
Si bien la lista de bonos en default es larga, ahora que el juicio está ganado, los títulos son difíciles de conseguir, por lo que subieron de precio.
Ayer cotizaban 70 dólares cada 100, un valor indicativo de los de oferta. Pero los tenedores tienen la posibilidad de recibir tres veces más por sus títulos si se unen a los fondos ganadores.
Según explicó Costa, el valor actual de los bonos en default refleja el canje de deuda de 2010. Pero los fondos buitre consiguieron tres veces el valor demandado (1,330 millones de dólares sobre 450 millones de dólares). Así que el resto de los holdouts pueden obtener algún valor entre el precio actual y lo que obtuvieron los litigantes.
Para materializar ese pago, ayer se rumoreaba que un banco de inversión ya estaba organizando un comité de holdouts con bonos bajo ley Nueva York para incorporarse al arreglo judicial que hará Argentina. Un formato que se entiende convendría al país para cancelar esta deuda impaga.
Esas buenas noticias son las que generan la afluencia de compradores, aunque todavía corran el riesgo de que la negociación fracase, tarde o termine en otro recorte de deuda.
El interés de compra no se muestra abiertamente, sino que los operadores se acercan con cautela a los posibles vendedores. ?Como estos bonos son ilíquidos, el que tiene una orden no sale por muchos lados, sino el título sube mucho en un segundo?, coincidió Martín Saud, operador de Balanz.
Los acercamientos son sigilosos: los brokers llaman a otro operador para preguntarle si tiene algún cliente con bonos que ofrecer sabiendo que éste no correrá la voz por el mercado. O disparan correos a sus contactos con el mensaje de que son compradores.
A su vez esos brokers actúan en nombre de bancos y fondos, que pueden estar negociando con Argentina.
Contenido de la Red Iberoamericana de Prensa Económica
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