Lectura 3:00 min
¿Remesas blanqueadas?
Como algunos colegas hemos sugerido, desde hace tiempo, las remesas que contabiliza el Banxico desde el 2002 de manera oficial, no corresponden con lo que otras fuentes permiten estimar.
Nuevamente se pone en el debate la medición de las remesas tras presentar los resultados del estudio titulado México-Estados Unidos: Estudio Binacional de Bienes Ilícitos , en el que se reconoció que entre 19,000 y 29,000 millones de dólares son lavados cada año por los cárteles mexicanos y que la mitad de ellos llegan por medio del sistema financiero, es decir, entre 9,500 y 14,500 millones, cantidades nada pequeñas, por cierto.
Otras fuentes consideran que la cuarta parte sería una cifra más realista, es decir, entre 4,750 y 7,250 millones de dólares.
En el estudio se destaca que uno de los mecanismos para insertarlos al sistema financiero es precisamente por medio de las afamadas remesas familiares, técnicamente llamadas transferencias electrónicas.
La mayor parte del dinero pasa la frontera en pequeñas cantidades (no tan pequeñas en realidad, pues comentan que entre 5,000 y 10,000 dólares por viaje).
Como algunos colegas hemos sugerido, desde hace tiempo, las remesas que contabiliza el Banco de México desde el 2002 de manera oficial (aunque parece que desde un año antes de manera extraoficial), no corresponden con lo que otras fuentes permiten estimar, pues las primeras se quedan demasiado lejanas hacia arriba de lo que encuestas en hogares y a migrantes puede deducirse.
Esta sospecha se ha fortalecido por la falta de transparencia de la autoridad monetaria para aclarar cómo se realizan dichas evaluaciones.
En varias publicaciones varios colegas, y yo personalmente, he alimentado esas sospechas con un conjunto de evidencias estadísticas.
Hoy parece que las autoridades estadounidenses comienzan a darnos algo de razón. Una parte de las ganancias del narcotráfico llega a nuestro país por medio de Western Union (así mencionado en el informe).
Pero la pregunta natural es entonces: ¿por qué sólo por esta empresa? En realidad no hay nada que evite que pueda usarse cualquier compañía remesera, pues todas utilizan básicamente las mismas formas para operar, además que las regulaciones para ellas son prácticamente las mismas.
Posteriores informaciones involucraron además a bancos estadounidenses, tales como Wells Fargo, Bank of America y Citigroup, instituciones identificadas por sus esfuerzos por acercarse a los migrantes hispanos y quienes entre sus servicios ofrecen transferencias de dinero a México.
Estos datos revelan que los recursos ilícitos se internan al sistema financiero y se lavan desde Estados Unidos, por lo que en México no causarían sospecha por lavado.
Sin embargo, no son remesas familiares, por lo que por una u otra, no corresponderían a lo que Banxico reporta como remesas familiares.
Pablo Pérez Akaki es profesor de tiempo completo en la FES Acatlán, UNAM