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Factores asociados a la felicidad
La felicidad no reside en la felicidad, sino en la consecución de la misma”.
Fiódor Dostoievski, escritor
A propósito de que las Naciones Unidas declararon hace 10 años el 20 de marzo como el día internacional de la felicidad, se publicó el Reporte Mundial de la Felicidad para el 2024. Dicho reporte presenta los resultados de la medición, con base en una encuesta que mide los niveles de felicidad auto declarada y percibida en 150 países del mundo.
Utiliza un modelo en el cual se pide a los encuestados que piensen una escalera en donde la mejor vida que puedan imaginar representa el escalón número 10 y la peor vida que puedan imaginar representa el 0; pidiéndoles posteriormente que califiquen su vida en el momento actual en esa escala del 0 al 10.
Posteriormente el reporte utiliza 6 variables para estimar las asociaciones de las respuestas de evaluación de la vida, para tratar de explicar las variaciones entre países. Las variables analizadas incluyen: el producto interno per cápita, el soporte social, la expectativa de vida saludable, la libertad, la generosidad y la percepción de corrupción.
En el reporte del 2024 la investigación puso énfasis en la vinculación entre la percepción de felicidad con las diferentes etapas de la vida. Como resultado general, en los países de occidente, los jóvenes tienden a ser los más felices y la felicidad declina hasta la etapa media de la edad; teniendo después una recuperación significativa en edades mayores. Sin embargo, en países como Estados Unidos, la felicidad de los segmentos jóvenes entre 15 y 24 años ha caído de manera importante en las últimas décadas. También se observa una variación importante en una percepción de inequidad respecto de la felicidad en las distintas regiones esta percepción aumenta entre personas de mayor edad.
De acuerdo con el reporte, en casi todo el mundo la percepción de apoyo social tiene un efecto notorio en la felicidad; siendo ese elemento el que más efecto tiene al respecto. El reporte tiene evidencia puntual de que los incrementos en interacciones sociales suman en la percepción de felicidad y disminuyen la percepción de soledad.
También destaca en el reporte, el que existe una percepción que vincula a la efectividad del Estado con la percepción de bienestar. Mayores niveles de percepción en los países de que el gobierno es efectivo, influyen de manera positiva en la percepción de felicidad.
Dicha percepción de efectividad está asociada a 5 factores. El primero se refiere a la capacidad fiscal, la capacidad del Estado para recabar recursos que le permitan atender las necesidades. En segundo lugar, está la capacidad del Estado para entregar servicios necesarios para la población. En tercer lugar, se refiere a la capacidad del Estado para mantener el Estado de derecho y el respeto alas leyes. Por último, se refiere a la percepción de efectividad del Estado para evitar conflictos civiles y simultáneamente evitar la represión de la sociedad.
En los países en que se encontró una percepción de efectividad estatal elevada y consecuentemente una calificación de felicidad alta, el nivel de inequidad en la distribución de la felicidad dentro de la propia sociedad disminuye.
Otro factor que el estudio reporta está asociado a la percepción de altruismo que impera en la sociedad. Sociedades que perciben que hay un entorno donde se favorece y prolifera el altruismo, tienden a generar reportes de felicidad más elevados.
Evidentemente, la felicidad es un elemento subjetivo, que para efectos de este reporte se asocia más como una percepción de bienestar personal y colectivo.
Lo que es evidente, es que asegurar niveles adecuados de satisfacción, de bienestar económico, financiero y personal, que se asocia con la salud, sumados a una percepción de gobiernos que son capaces de asegurar condiciones adecuadas para la población, son los que están vinculados con un mayor nivel de calificación de felicidad.