Lectura 4:00 min
Toman represalias por detención de "El Pozolero" en Tijuana
Un comando armado disparó en 200 ocasiones contra las instalaciones de la policía local, sin que se registraran muertos o heridos.
Un comando armado abrió fuego contra una base policial en el noroeste del país en una posible represalia por la detención de un hombre señalado de haber disuelto en ácido al menos 300 cuerpos de víctimas del narcotráfico, informaron autoridades estatales.
Ayer, autoridades federales presentaron a en las instalaciones de la SIEDO a Santiago Meza López, quien presuntamente trabajaba para la organización de los hermanos Arellano Félix en la desaparición de cadáveres.
La detención se llevó a cabo por elementos del Ejército mexicano en colaboración con Policía Federal en el kilómetro 73 de la carretera Tijuana-Ensenada en el estado de Baja California, en un operativo en el que aprehendieron a otros dos sujetos y a una menor de edad.
De acuerdo con investigaciones ministeriales, esta persona conocida por el alias de "El Pozolero", formaba parte de los 20 más buscados por el FBI
El hombre es señalado de trabajar para Teodoro García Simental, ``El Teo'', un antiguo miembro del cartel de los hermanos Arellano Félix que presuntamente se alió a otro grupo del narcotráfico y que ha sido responsabilizado de la ola de violencia que priva en Tijuana y sus alrededores, en la frontera con Estados Unidos.
La delegación de la policía, localizada entre Tijuana y Ensenada en el estado de Baja California, recibió al menos 200 disparos que dañaron la fachada de las instalaciones y al menos cinco patrullas, aunque no se reportaron heridos, señaló la Procuraduría estatal en un comunicado.
- Método de terror
La Procuraduría General de la República (PGR) informó que Meza describió que metía los cadáveres que le entregaba ``El Teo'' en un recipiente con agua a los que vaciaba sosa cáustica; los ponía al fuego y al empezar a hervir ponía restos humanos. Lo que quedaba era tirado en lotes baldíos.
Meza dijo que aprendió a ser ``pozolero'' con una pierna de res.
Las autoridades estiman que deshizo al menos 300 cuerpos en la última década.
- Entre los más buscados
A Santiago Meza López también se le conoce como "El Chago" o "El Chaguito", y sus cómplices son Fernando López Alarcón y Héctor Manuel Valenzuela Lobo, mientras que la menor quedó a disposición de las autoridades.
Al ser asegurado, Santiago Meza tenía en posesión una pistola ametralladora calibre .9 milímetros modelo MP5, una carabina calibre 5.56 milímetros modelo ZM4, un fusil calibre .308, modelo HK-91 y un fusil calibre 0.5, modelo 82A1, así como dos granadas ofensivas.
También le fueron incautados varios cartuchos, muchos de estos para armas largas. El detenido es un elemento importante en la organización de Fernando Sánchez Arellano alias "El Ingeniero".
Santiago Meza López manifestó ser "pozolero", con este término se le conoce en el crimen organizado a la persona que desaparece los cuerpos de los que han sido ejecutados o están reportados como extraviados.
"El Chago" reconoció que desde hace nueve años empezó a trabajar como "pozolero" con Marco Antonio García Simental alias "El Cris", quien es hermano mayor de Teodoro Eduardo García Simental.
Afirmó que "El Teo" le ordenaba que se ubicara en un determinado lugar, y ya estando ahí por radio o teléfono le decía las características de los vehículos que le llevaban los mismos, y cuyos conductores al verlo le echaban las luces.
Sostuvo que la última vez que hizo un "pozole" fue hace 15 días, por orden de "El Teo", y que los utensilios que usaba para "pozolear" además de químicos y tambos, era un equipo de protección como guantes de látex y máscara contra gases.
En las próximas horas se determinará la situación jurídica de los detenidos dentro de la averiguación previa PGR/SIEDO/UEIDCS/032/09-01, en la que señala que hay indicios de que la cifra de personas desaparecidas por Meza López podrían superar los 300 cuerpos.
apr