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Inversión en vivienda durante este sexenio será de 2.3 billones de pesos
Se busca apoyar a cerca de 20 millones de personas mediante 5.4 millones de acciones, principalmente del sur-sureste del país.
Al cierre de esta administración federal, la inversión realizada por diversos entes gubernamentales durante este gobierno para el tema de vivienda se prevé sea de 2.3 billones de pesos, con un enfoque centrado en acciones de mejoramiento y ampliación y, en menor medida, la edificación de nuevas unidades, según lo anunciado en la presentación del Programa Nacional de Vivienda.
Ayer miércoles, Román Meyer Falcón, titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), presentó el programa por el cual se pretende apoyar a cerca de 20 millones de personas mediante 5.4 millones de acciones de vivienda (subsidios y financiamiento), principalmente del sur-sureste del país, donde se concentra la mayor parte del rezago habitacional, que en territorio nacional alcanza 9.4 millones de viviendas.
“Tenemos 9.4 millones de acciones en rezago a nivel nacional, esto es un tema importante que el programa trata de sensibilizar. La estrategia se centra en la población que históricamente no había sido atendida. Es obligación del Estado mexicano atenderlos y ellos son el punto central de este programa”, acotó el funcionario y añadió que también se atacará el tema de las 650,000 viviendas abandonadas que se tienen detectadas en el país.
“Al término de este sexenio, prevemos una inversión de 2.3 billones de pesos, que se estaría llevando a cabo en acciones en materia de vivienda dentro del conjunto de instituciones (gubernamentales), además hay que sumar las acciones de la banca privada”.
En su intervención, Carina Arvizu Machado, subsecretaria de Desarrollo Urbano y Vivienda de la Sedatu, indicó que este programa es de los pocos en el mundo que comprende los siete elementos de la vivienda adecuada establecidos por ONU-Hábitat, que son: accesibilidad, seguridad de la tenencia, habitabilidad, asequibilidad, adecuación cultural, disponibilidad de servicios y ubicación.
“En México, las personas que menos tienen son las que más gastan en sus viviendas, hasta 60% de sus ingresos, cuando deberían de destinar al menos una tercera parte”, acotó Arvizu Machado.
El Programa Nacional de Vivienda es el documento en el que se establecen los lineamientos de todas las estrategias del gobierno federal que realizará en esta administración. Para los funcionarios de la Sedatu, es una pieza clave para la “pacificación y transformación del país”.
Arvizu Machado destacó que dentro de los objetivos del programa está establecer un modelo territorial y de gestión del suelo que considere a la vivienda como elemento central para la planeación del territorio; garantizar la coordinación entre los organismos nacionales del sector y fortalecer la coordinación con la Iniciativa Privada para fomentar acciones para garantizar el derecho a la vivienda.
Se busca reducir el rezago en 2.2 millones (de acciones), crecer 11% en el sector de la vivienda (al 2024) y reducir en 25% el costo de los trámites”, acotó Arvizu Machado.
La funcionaria de Sedatu explicó que el plan busca atender varios puntos como, por ejemplo, promover la creación de una canasta básica para la construcción de vivienda; apoyar a través de financiamiento a las viviendas con mayor rezago; desarrollar mecanismos que incentive proyectos en su conjunto como la creación de cooperativas de vivienda, esquemas de arrendamiento, alquiler con opción a compra, entre otros.
Financiar a los más pobres
Durante su intervención, Alfonso Romo Garza, jefe de la Oficina de Presidencia, indicó que para poder llegar a cumplir con las metas establecidas en el programa, es necesario que el costo del dinero disminuya, con el fin de poder financiar a las personas de más escasos recursos para darles soluciones habitacionales.
“Hay que buscar las fórmulas, tenemos que encontrar la formas de financiar a los más necesitados, si no cumplimos con ese objetivo el gobierno no está cumpliendo con su responsabilidad”, detalló Romo Garza.
Según lo detectado por las autoridades, de las 9.4 millones de viviendas en rezago habitacional, 6.4 millones corresponden a personas que no son derechohabientes de algún organismo de seguridad social, por lo que el reto es atender a este universo con acciones de acuerdo con sus necesidades, con el fin de alinear a la oferta y demanda en el tema de vivienda.