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México dirigirá la Alide: Mújica
La banca de desarrollo no debe competir con las instituciones privadas, debe ser un complemento para el desarrollo.
La banca de desarrollo en México y en toda Latinoamérica está cambiando hacia un modelo de apoyo a los sectores económicos y personas que no están siendo atendidos por el sistema financiero tradicional, pero participando sólo con proyectos que tengan viabilidad y rentabilidad en el mediano y largo plazo, aseguró Rodrigo Sánchez Mújica, director general de Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura (FIRA) y nuevo presiente de la Asociación Latinoamericana de Instituciones Financieras para el Desarrollo (Alide).
La banca de desarrollo está para abrir mercados y una vez que se hayan creado las mejores condiciones para hacer negocios, debe salirse y dejarle el paso a las instituciones privadas para que atiendan esos nuevos proyectos , aseguró el funcionario.
En México, la banca de desarrollo reportó una cartera total de 452,500 millones de pesos al mes de junio del 2011, esto es un crecimiento de 4.7% anualizado, donde 45% del portafolio está colocado con el sector privado, 31% está con el gobierno federal, 13% con los estados y 11% en otros rubros.
México es socio fundador desde hace 43 años de la Alide; sin embargo, es la primera vez que una institución financiera rural nacional preside al organismo, el cual representa a la banca de desarrollo de América Latina y el Caribe.
Con más de 80 miembros, la Alide tiene su sede en Lima, Perú, donde su principal objetivo es contribuir al fortalecimiento de sus instituciones afiliadas y contribuir al financiamiento del desarrollo económico y social de la región.
De esta forma, el Presidente de Alide dijo que desde la década pasada, la banca de desarrollo dejó de lado el modelo de créditos directos, el cual se mantenía de subsidios y con un enfoque asistencialista.
De acuerdo con la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), la banca de desarrollo mexicana alcanzó utilidades por 5,156 millones de pesos al primer semestre del 2011, lo que representó 32% más que lo reportado hace un año.
Ahora existe una banca de desarrollo con un nuevo paradigma, más orientada a satisfacer la demanda a través del esquema de financiamiento de segundo piso y no sólo apoyando el proyecto productivo, sino a todo el entorno que lo rodea, familia, estilo de vida y medio ambiente , explicó.
Para Sánchez Mújica, la banca de desarrollo debe ser un complemento a la banca comercial y no competir, lo que lleva a que el esquema del sector se distribuya en varios sectores económicos.
En México tenemos varios bancos distribuidos en los tres sectores económicos, pero en el caso de Brasil se tienen 15 bancos de desarrollo y algunos de ellos son privados , detalló el funcionario.
Una variada agenda,
PRESIDENCIA DE LA ALIDE
México tendrá un año la Presidencia del organismo, con opción a una reelección, la cual tiene tres líneas principales de trabajo: la inclusión y modernización de la banca de desarrollo latinoamericana, mayor fomento al financiamiento agrícola, así como a proyectos que cuiden el medio ambiente.
Tradicionalmente, el país ha tenido un papel relevante en la Alide, aportando experiencia y visiones de lo que debe ser la banca de desarrollo, mientras que para el país es importante tener la Presidencia, ya que nos coloca en la mira de los organismos internacionales ,indicó.
En México se llevará a cabo una conferencia sobre turismo y banca de desarrollo en el mes de septiembre, auspiciada por la Alide, y una reunión con el Banco Interamericano de Desarrollo en el mismo mes también dentro de territorio nacional.Además de la participación de FIRA en la organización latinoamericana, están inscritos Nafin, Bancomext, Banobras y Financiera Rural.
Sánchez Mújica agregó que como parte de las actividades que tiene, está llevar a cabo la Asamblea General el próximo año, además de programas de cooperación en temas de microfinanciamiento, financiamiento a la infraestructura, agrícola y medio ambiental.
ehuerfano@eleconomista.com.mx