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México lideraría el crecimiento del crédito bancario en América Latina: Moody’s
Un análisis de Moody’s Investors Service estima que la demanda de créditos de individuos y empresas se incremente a un ritmo promedio de un solo dígito en el 2024, aunque de forma más lenta.
México probablemente liderará el crecimiento del crédito bancario en la región de América Latina durante el 2024, consideró Moody’s Investors Service.
En un reporte sobre banca en América Latina titulado “Factores crediticios clave de 2024: los mercados locales son resilientes, pero las tasas altas crean obstáculos”, la agencia detalló que en México se proyecta una expansión más dinámica de la demanda de créditos y del apetito de los bancos por el riesgo, en línea con la perspectiva de crecimiento económico del país.
De acuerdo con el documento, la expectativa es que el crecimiento del crédito en la región de Latinoamérica sea de alrededor del 9.0% hacia finales del 2023, ligeramente por encima del promedio del período 2017-2019; mientras que la estimación es que la demanda de créditos de individuos y empresas se incremente a un ritmo promedio de un solo dígito en el 2024, aunque de forma más lenta.
Nuestra estimación está influenciada por las altas tasas en comparación con el último ciclo de 10 años y por las difíciles condiciones operativas en algunos países”, destacó.
Durante el 2023 -sin conocerse aún las cifras de diciembre- el crédito de la banca comercial al sector privado en México mostró un buen dinamismo -con una ligera desaceleración al cierre del año- sobre todo en consumo. Información del Banco de México (Banxico) refiere que en noviembre pasado la cartera vigente total creció 6.0%, y al interior, el portafolio destinado a las familias aumentó 12.8%, el de vivienda lo hizo en 4.7% y el de empresas en 2.9%.
Condiciones más favorables
El reporte de Moody’s Investors Service consideró que los bancos de América Latina podrían presentar condiciones operativas más favorables en el 2024, debido a la flexibilización temprana de la política monetaria y el sólido crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) en la mayor parte de la región.
La estabilidad de los mercados laborales y el fuerte consumo, seguirán favoreciendo las condiciones crediticias, respaldadas aún más por una menor inflación”, dijo.
En el caso de México, apuntó, la solidez de las inversiones y el consumo, incentivarán el crecimiento.
“La confianza de los consumidores y empresas, respaldada por los ajustes al salario mínimo, flujos de remesas casi récord, un mercado laboral estable y las ventajas del nearshoring, junto con la finalización de los proyectos de infraestructura pública, estimularán las economías regionales y el apetito de los bancos por los segmentos de mayor riesgo”, puntualizó.
Calidad de cartera se estabilizará
El reporte de Moody’s resaltó que en 2023 los índices de cartera morosa en la mayoría de los países de la región, superarán los niveles registrados en los últimos dos años, pero se espera ver una mejora gradual en el 2024, lo que refleja una mejor capacidad de pago de los prestatarios, gracias a la estabilidad del mercado laboral, así como la reducción de la inflación y las tasas de interés.
Asimismo, expuso, los bancos de todos los países mantienen amplias reservas para pérdidas crediticias y una capitalización adecuada, lo que protege a los sistemas bancarios contra pérdidas inesperadas.
Precisó, no obstante, que los riesgos para el 2024 están relacionados principalmente con la volatilidad de los mercados globales y las incertidumbres políticas locales, las cuales podrían provocar desequilibrios macroeconómicos y una disminución de la confianza empresarial en la región.
Rentabilidad seguirá estable
En cuanto a la rentabilidad de los bancos de la región, Moody’s previó que ésta siga estable, a medida que los márgenes de interés neto se mantengan altos, y los ingresos por comisiones sean sólidos.
“Con la flexibilización de la política monetaria, esperamos ajustes en las tasas de interés de los préstamos, ya que éstas permanecerán elevadas y los bancos ampliarán sus volúmenes de negocio con cautela, lo que se traducirá en menores provisiones para pérdidas crediticias en comparación con los últimos años. Los costos de financiamiento también se verán favorecidos por la caída de las tasas de interés”, puntualizó.
Para México, pronosticó que los ingresos por intereses de los bancos, se vean impulsados por un apetito relativamente mayor por el riesgo y un crecimiento de los préstamos, lo que es acorde con el enfoque de las instituciones, de ampliar los préstamos de consumo, gracias al impulso generado por la demanda interna.
La agencia añadió que las inversiones en innovación serán cruciales, no sólo para sostener los ingresos, sino también para mantener la competitividad frente a los nuevos participantes.
Finalmente, la agencia señaló que la capitalización de los bancos de la región se mantendrá, debido a la generación constante de capital interno y el crecimiento moderado; en tanto que la elevada liquidez a nivel local, les ayudará a evitar el ajuste de las condiciones financieras en otros lugares.