Buscar
Sector Financiero

Lectura 5:00 min

Unión de Crédito General: El reto en 2022 es reinventar la figura de unión de crédito

Altas tasas de interés, inflación arriba de las estimaciones y la escasez de financiamiento, las preocupaciones.

Alberto de la Fuente también es consejero de Conunión. Foto: Cortesía

La pandemia por la Covid-19 y sus variantes y las elecciones fueron los ingredientes que mantuvieron a la expectativa a las empresas en México y el mundo, sin embargo, el año pasado fue mejor de lo que esperaba, así lo comentó Alberto de la Fuente, presidente del Consejo de Administración de la Unión de Crédito General.

“Algunas empresas ya empezaron a reactivarse, el problema es que la información financiera de muchas de ellas quedó deteriorada con motivo de los paros que hubo e incluso algunas ingresaron a cartera vencida. Ahora que la economía se está recuperando y empiezan a tener pedidos es difícil que puedan acceder al crédito, además de que los costos de energía, de transporte, de las materias primas se han elevado, y el capital de trabajo que presupuestaban antes ya nos les alcanza actualmente”, dijo.

Insistió en que, las pequeñas y medianas empresas (pymes) están pasando por un momento difícil, a pesar de que ya tienen pedidos, no los pueden surtir por falta de recursos y el financiamiento no se les puede otorgar porque sus estados financieros no califican ante las instituciones de crédito y a ello, se le suma que la banca de desarrollo que antes participaba con programas de garantías que podrían aliviar la situación, no ha dado respuesta para apoyar a las pymes.

“Se ha caído la colocación de créditos, se han reestructurado muchos créditos existentes ya que, los flujos no les dan y hay que actualizar los créditos a sus nuevos flujos”, comentó Alberto de la Fuente en entrevista con El Economista.

Nubarrones

El también consejero de ConUnión dijo que este año se va a mantener como el último trimestre del 2021 con cierta recuperación, pero hay nubarrones que se van a mantener en el corto plazo y que van afectar a los proyectos y la toma de decisiones de nuevos desarrollos de todo tipo de empresas.

“Se ven algunas nubes negras en el horizonte como es el caso de la Reforma Energética, la pandemia no deja de estar, las tasas de interés y el tipo de cambio peso-dólar han repuntado y la inflación no se ha podido contener y esto nos llevaría a que sigan aumentando las tasas de interés, a la escasez de las materias primas y a que continúen los altos costos en el transporte nacional e internacional”, consideró el presidente del Consejo de Administración de la Unión de Crédito General (UCG), institución financiera situada en Puebla.

La figura

La figura de UC nace a principios de los años 30 y a estas alturas ya no corresponde, aunque ha habido cambios, hay que revisar para que se adecúe a las circunstancias actuales y responda mejor a los empresarios, dijo.

“Siempre hay áreas de oportunidad para mejorar, adaptarnos a las nuevas circunstancias y esto se debe realizar en conjunto con la banca de desarrollo. Una banca de segundo piso más digital en sus trámites con los intermediarios financieros, además de revivir los programas de garantías que había a primeras pérdidas y apoyo de capital semilla para empresas”.

Fondeo

Explicó que la mayoría de las UC se fondean con sus socios, “los menos nos fondeamos con la banca de desarrollo y con la banca comercial”.

Dijo que la banca comercial se ha puesto muy estricta con el tipo de garantías que pide para las líneas de crédito. Sectores como construcción y financiero han restringido las garantías o han limitado los avales para las operaciones de crédito.

“Desde hace 28 años venimos intermediando con todas las bancas de desarrollo, hoy como nunca ha habido un distanciamiento muy grande, a excepción de FIRA. Ha habido muchos cambios en los cuadros directivos y algunos siguen trabajando en home office. Nunca había estado tan ausente la banca de desarrollo, y no se ve nada nuevo, ningún programa para apoyar a las empresas”, lamentó.

Cláusulas

Hay algunos contratos con la banca de desarrollo que establecen penalización por no ejercer la línea de crédito en su totalidad, aún en una situación complicada como la que se ha vivido en casi dos años. “La Condusef, organismo que protege los derechos e intereses de los usuarios de productos y servicios financieros, prohíbe y sanciona a los intermediarios financieros por el uso de cláusulas de penalización por el incumplimiento al clausulado de sus contratos.

“Sin embargo, no vigilan ni intervienen cuando la banca de desarrollo o Fideicomisos de Fomento, sí incluyen en sus contratos, con los intermediarios financieros que acreditan, cláusulas con sanciones monetarias por incumplimiento de algún apartado que, en otras instancias, se considerarían abusivas ya que no guardan proporción con la acción cometida. No se toma en cuenta que los intermediarios financieros son el canal por el cual se distribuyen recursos para fomentar el crecimiento económico del país”, concluyó Alberto de la Fuente.

patricia.ortega@eleconomista.mx

Temas relacionados

Coordinadora de Operación Editorial de Suplementos y Ediciones Especiales de El Economista. Licenciada en Economía por la Universidad Nacional Autónoma de México. Estudió una especialización en Periodismo Económico en la Universidad de Miami, auspiciada por la Fundación Reuters. Ganadora del premio por la "destacada cobertura en finanzas verdes", entregado por la BMV y el Consejo Consultivo de Finanzas Verdes. Ha sido analista de mercados, editora de finanzas y creadora de ranking de negocios, responsabilidad social y mercados, y ha trabajado en la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas, Reforma, Excélsior, Mundo Ejecutivo, Expansión, Fortuna, Infosel y Economática.

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí

Noticias Recomendadas