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Deconstruyendo una mente maestra
Esta edición del personaje más famoso de sir Arthur Conan Doyle es un extraordinario compendio sobre las aventuras del detective, además de desmenuzar a su creador y a su contexto histórico.
El libro de Sherlock Holmes es una fabulosa radiografía del personaje creado por sir Arthur Conan Doyle en 1887. Este ejemplar de lujo editado por Altea (Penguin Random House) fragmenta al personaje, su contexto y a cada una de sus historias para mostrarnos el vasto engranaje que sostiene la leyenda.
En este ejercicio, se tocan las figuras emblemáticas del universo Holmes, como el doctor Watson, su hermano Mycroft, el inspector Lestrade y su némesis, el profesor Moriarty.
El libro aborda todos y cada uno de los textos de Holmes y los desmenuza en líneas de tiempo, analiza sus personajes y da detalles curiosos sobre el contexto de la historia, situaciones que van desde la botánica y los venenos, el espionaje, buscadores de fortuna en Sudáfrica, sucesión testamentaria, entre otros
El libro de Sherlock Holmes dedica los capítulos finales a explicar el contexto de Holmes: nos habla sobre las costumbres de la época victoriana, las corrientes de la ciencia forense, sobre el método deductivo que frecuentemente utilizaba el personaje, sobre el impacto que tuvo sobre el género detectivesco y la novela negra, los orígenes del personaje en la ficción y en la realidad, así como la incursión del personaje en el cine y posteriormente a la televisión. Ojo: es muy importante entender que no se trata de un estudio académico; aunque su contenido es exhaustivo, funciona como un libro de consulta.
Desmenuzando al creador
Para entender a Holmes en su totalidad, se dedica especial atención al personaje de carne y hueso que lo hizo posible: el mismo Conan Doyle, de quién se cuenta su historia, aventuras y desventuras que nos hacen entender la complejidad con que abordó a su personaje más popular.
Los editores y colaboradores del proyecto se refieren a Doyle como un victoriano con la mentalidad del siglo XX. Frase que puede corroborarse en el relato El rostro amarillo (1893) de Sherlock Holmes, texto en donde se aborda el caso de un matrimonio que debe enfrentarse al estigma del matrimonio interracial, una problemática en donde al final, el amor consigue romper todos los prejuicios.
Doyle fue un hombre excepcional, según se nos relata en el libro. Era médico de profesión y su título nobiliario lo consiguió gracias a su labor durante la guerra. Fue un entusiasta de la fotografía, practicaba esquí de fondo, cricket, rugby y hasta box. Doyle escribió poesía, teatro, dramas familiares, historias sobrenaturales, romances históricos, cuentos relacionados con la medicina y hasta tratados de espiritismo, tema del cual era un verdadero apasionado, de hecho, los últimos años de su vida se dedicó a dar conferencias por Australia, Canadá, Estados Unidos y Sudáfrica.
Resulta curiosa esta vena espiritista, puesto que estamos hablando del creador de Holmes, un personaje cuyas conclusiones y aseveraciones está siempre fundadas en evidencia. En el caso del espiritismo, la comprobación de los casos es prácticamente imposible. Quizá, como ocurría con Holmes, Doyle veía en los fenómenos paranormales algo que no veían los demás, y ansiaba a toda costa comprobar sus hipótesis. Al parecer, su paso por el espiritismo fue desafortunado y, es que Doyle era muy crédulo, así que terminó siendo engañado por algunos estafadores de lo paranormal.
El libro de Sherlock Holmes es sumamente útil para iniciados y no iniciados, y seguramente a ambos grupos los sorprenderá con algunos detalles e información que no conocían, dando pie para que exploren a profundidad el universo del famoso detective.
Esta obra es prácticamente una enciclopedia que resulta agradable a la vista y capaz de sorprendernos con lo que se va mostrando en sus páginas: se vive como una caja de sorpresas, contrario a Internet en donde uno tiene el control de lo que desea buscar.
La calidad de contenidos de este ejemplar demuestra que es bueno que existan otras referencias a Wikipedia, donde muchas veces el contenido está mal escrito y es de dudosa procedencia. En otros palabras: qué bueno que aún existan los libros, y si uno es fan de Holmes, qué mejor que exista El ?libro de Sherlock Holmes.