La música tradicional continuará con o sin declaratorias de la UNESCO

Los músicos que se reunieron en el Segundo Coloquio de Salvaguarda de la Música Tradicional Mexicana, para hablar sobre la importancia de ser Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO, se mostraron orgullosos de sus tradiciones, sus creaciones, cultura y sonidos regionales, sin embargo, al ser cuestionados sobre qué los hizo reunirse, cada uno expresó sus dudas o inconformidades respecto de las declaratorias que otorga la UNESCO.

Con o sin promulgación de la UNESCO, somos los mismos, ése fue el sentir de cada uno de los participantes que en dos días de actividades tuvieron la oportunidad de compartir sus opiniones sobre el tema, plantear propuestas alternativas de salvaguarda, y proponer soluciones a los problemas suscitados por las declaratorias.

Así, representantes de la ceremonia ritual de los voladores de Papantla, los parachicos de Chiapa de Corso, el mariachi y la pirekua de Michoacán, explicaron lo que ha sucedido desde que se integró su tradición como Patrimonio Cultural Inmaterial.

Rosaldina Vázquez, músico purépecha de la comunidad de Charapan Michoacán, explicó que la música significa integración.

La salvaguarda de las pirekuas siempre ha existido en las comunidades y por sus propios medios, nunca hubo una consulta y no existe algún beneficio extra para los músicos (a consecuencia de la declaratoria), esto sólo beneficia a las grandes empresas, seguiremos tocando y cantando, pero no estamos preocupados por algún apoyo extra , explicó.

Asimismo, Pablo Sebastián, músico y representante de las comunidades Patrimonio Cultural Inmaterial, explicó en entrevista que al ser informados del coloquio organizado por la UNESCO hubo un proceso de reflexión desde las comunidades para tratar de acercarse a lo que estaba sucediendo, buscaron los documentos referentes a la declaratoria y en un principio se veía con buenos ojos que por fin voltearan a las comunidades, sin embargo, con la experiencia de la denominación de Patrimonio Inmaterial de la ceremonia de Día de Muertos, entendieron que el beneficio no sería para ellos.

Sin beneficio al compositor

De manera colectiva, los músicos tradicionales piensan que la existencia de intermediarios (figuras constituidas en asociaciones civiles, representantes culturales y autoridades) no permite que el recurso destinado a la preservación de la música vaya directo a las comunidades. Este apoyo debe llegar a través de representaciones colegiadas por región, subregión y por comunidad, así se podría administrar de manera clara y transparente el recurso y que llegue verdaderamente al compositor.

No hay un beneficio tangible, incluso hay un enojo, hay muchos proyectos alrededor de la cultura que son buenos en la lógica institucional, sin embargo, desde la perspectiva de los músicos, estas acciones no embonan, nos llegan reglas y esquemas que no son la realidad de un compositor , comentó Pablo Sebastián.

En el evento organizado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia, José Luis Sebastián, compositor pireri de Comachuen, cuenta que se enteró del reconocimiento, pero hasta la fecha no sabe en qué beneficiará a su comunidad y a los demás compositores, los grupos que firmaron el reconocimiento son sólo algunos grupos cercanos al gobierno, pero los verdaderos pireris están en las comunidades, ellos son plagiados y los demás ganan dinero a sus espaldas. La pirekua no está muerta, mientras haya compositores va a haber pirekuas , declaró.

Nuevas declaratorias,?en proceso

Por otro lado, el son jarocho y el huasteco están en proceso de patrimonialización, por lo que representantes comunitarios de estas expresiones musicales también hablaron sobre la pertinencia y los posibles escenarios en este reconocimiento.

Rafael Vázquez, del Instituto Veracruzano de la Cultura, destacó que como organismo aún no han sido incluidos en este proceso y como músico el término de patrimonialización es muy familiar por la experiencia con Tlacotalpan, que en 1998 se declaró como Patrimonio de la Humanidad, pero a la vez tiene mucho desconocimiento, ya que no se sabe qué beneficios, compromisos o consecuencias llegan a través de la declaratoria.

Aseguró que en el supuesto caso de que se diera este proceso de declaratoria se requiere mayor conciencia sobre el tema, el respeto de las comunidades y grupos, involucrar a las comunidades en las decisiones, crear uno o varios organismos competentes para la salvaguarda, buscar que la mayoría esté de acuerdo y que las instituciones sólo sean facilitadoras y respeten las propuestas de las comunidades.

Si a mi me preguntaran ¿qué pasaría si no se enlista al son jarocho dentro del patrimonio cultural?, yo diría que no pasaría nada, todos los involucrados seguiremos haciendo seminarios, cursos, talleres y más fandangos. El tema es muy complejo y no es que no podamos ponernos de acuerdo, pero se debe analizar esta situación y revisar las experiencias pasadas , concluyó.

Por su parte, Fredi Naranjo Vega, músico de son jarocho, explicó: Yo no entiendo por qué la gente no voltea a ver primero a las rancherías donde están los viejos, donde se hace el son campesino y son ellos quienes tienen la información. Están tratando de poner en un formato a una cultura que tiene más de 300 años, los empresarios se benefician de los esfuerzos de la gente que verdaderamente hace la cultura en su pueblo .

Aseguró no estar de acuerdo en que el son jarocho se haga patrimonio, no se puede meter en un formato algo que se habla en diferentes idiomas, tenemos estilos diferentes y esto es lo que da riqueza a esta cultura, el diálogo es noble porque es a través de la música y esa nobleza es la que a su vez permite que se abuse de ella. Unos ven negocio y otros ven una forma de vida , continuó.

Para concluir, Saúl Bernal, músico desde los 11 años, opinó que no se necesita un reconocimiento de esta naturaleza: Los jarochos ya hemos luchado por mucho tiempo para crear nuestra manera de trabajar, para mí ya es mi patrimonio, no necesito que la UNESCO me lo diga. El son no se tiene que rescatar, porque hay mucha música y seguirá habiendo, pero la relación de desconfianza entre las autoridades y los pueblos es mucha .

Amparo Sevilla Villalobos, coordinadora del coloquio, aseguró que la finalidad de éste fue hacer llegar el sentir de los involucrados a las autoridades y se tomen cartas en el asunto.

nelly.toche@eleconomista.mx