Como se ha demostrado con innumerables estudios, el uso de energías tradicionales lleva consigo una enorme huella ecológica, compuesta por la explotación de recursos naturales, la pérdida de biodiversidad, la contaminación de agua y suelos, y las emisiones de CO2, por ello con el uso de la tecnología se han buscado soluciones eficientes que den paso a una nueva forma de interactuar con el medio ambiente.
Tal es el caso de Quartux, una empresa de soluciones en gestión energética que ha apostado por los mercados con mayores consumos. Alejandro Fajer Botaya, director de operaciones explica a El Economista: “Estamos utilizando la inteligencia artificial apoyado de nuevas tecnologías como son los sistemas de almacenamiento de energía de ion litio. Con estas dos herramientas lo que se busca es que grandes consumidores en México como el sector hotelero, tengan un ahorro económico importante en su consumo energético, pero también en temas de Co2, que son las emisiones que ellos están generando directamente al estar consumiendo energía".
Lo que Quartux hace es instalar baterías de ion litio diseñadas a la medida de grandes consumidores como: Moon Palace, Marriot, Mayakoba, Krystal resorts, Xcaret, todos estos ejemplos tienen un consumo muy grande de electricidad principalmente por aire acondicionado, este es un consumo que ellos no pueden modificar en sus diferentes instalaciones.
Por ello con baterías de esta naturaleza se permite consumir energía de labor solamente cuando esta es la más barata y la más limpia. Aquí es donde entra la inteligencia artificial, “nosotros al instalar estas baterías, también instalamos un software patentado de control y lo que pasa con él es que estamos viendo en tiempo real cuáles son las condiciones que se están teniendo de la red en ese momento y el costo de la energía".
Fajer explica que hay ciertos horarios en que la energía se vuelve muy sucia y por lo tanto es el horario más caro, pues se trata de desincentivar el consumo en estos momentos. Cuando eso sucede espacios como los hoteles utilizan la batería de ion litio y con ello comienza a verse significativamente la reducción de huella de carbono además de un ahorro de hasta el 40% en el costo energético.
¿Cómo modificar el consumo energético?
Como sabemos existen diferentes fuentes de generación de electricidad, hoy las de índole renovable y con muy bajas o nulas emisiones de huella de carbono por kilovatio que se generan principalmente son la hidráulica, eólica y solar; estas están ligadas a cierta temporalidad por lo que en ciertos horarios críticos, cuando hay mayor consumo, aproximadamente de 18:00 a 22:00 horas y medio día, ahí es donde prenden las plantas para poder abastecer las altas demandas, pues las energías renovables no abastecen las necesidades. Con el uso de una batería de litio lo que se hace es modificar el consumo del cliente para que no tenga que consumir en estos horarios.
“Al tener una batería que modifica su consumo, diciéndole cuando cargar y cuando descargar, estamos viendo ahorros significativos de 40% en recibos de un mes para otro y una reducción de alrededor de 2,200 toneladas de dióxido de carbono equivalente de gases de efecto invernadero durante la vida útil del sistema".
Hoy se trabaja con alrededor de 15 sectores diferentes, y hay instalaciones en todos los estados del país, por lo que cualquier gran consumidor podría transitar a estas tecnologías, manipular todos sus consumos y tener el mismo resultado en cualquier industria, ya sea retail, manufactura, vidrio, cementera, acerera, textil, entre otras.
Lo retos actuales
Desde el punto de vista de Fajer, tenemos aún limitantes, por ejemplo, hoy se podrían además utilizar incentivos desde el gobierno para poder instalar este tipo de sistemas con beneficios globales, esto permitiría acelerar la adopción de los sistemas con energía eficiente, además ayudar a acelerar la transición del usuario.
Por otro lado, un factor importante es el económico, pues aún se trata de sistemas muy caros y no necesariamente todas las empresas tienen el capital para invertir en estos sistemas, “lo que hacemos nosotros por ejemplo, es que tenemos una línea de financiamiento de alrededor de 500 millones de dólares, específicamente para usuarios mexicanos, donde pueden instalar el equipo con cero inversión e ir viendo beneficios y hacerse del equipo, eso nos ha permitido generar más adopción en el mercado".
Desde la trinchera energética, el uso y adopción de tecnologías apenas está comenzando a diferencia de otras áreas donde la inteligencia artificial ya permea de mayor manera. Sin embargo, hoy ya nos permite mucho mayor exactitud, para saber sobre nuestros consumos y la forma de disminuir costos, para ello se requiere de machine learning, integrar aplicaciones y algoritmos, por la complejidad de la red, con ello se pueden tomar mejores decisiones. “Creemos que todavía no tenemos ni el 1% del mercado actual, por lo que todavía hay mucho por recorrer en México", concluye el especialista.
nelly.toche@eleconomista.mx