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Moncayo, autor del segundo himno nacional
Los homenajes al creador del famoso Huapango por parte de las orquestas mexicanas son disparejos; destaca el olvido de la Sinfónica Nacional.
Dentro de unos días se cumple el centenario del natalicio de José Pablo Moncayo (Guadalajara, Jal., 29 de junio de 1912-ciudad de México, 16 de junio de 1958), uno de los más talentosos compositores mexicanos y también de los de mayor presencia internacional; autor de varios conciertos, dos piezas de ballet y la ópera La Mulata de Córdoba, con libreto de un poeta extraordinario, Xavier Villaurrutia, del grupo de Contemporáneos.
Moncayo, alumno de Aaron Copland, Candelario Huízar y Carlos Chávez, es el creador de Huapango (1941), la pieza que después del Himno Nacional se considera la más representativa del alma mexicana, esa que en el 2010, cuando en este país éramos nacionalistas y revolucionarios , llenó hasta el cansancio los espacios en radio como cortinilla de la Hora Nacional y en televisión como fondo musical de un comercial de cerveza.
Esta obsesión oficial y oficiosa casi nos vacunó contra la pieza que, no obstante el manoseo, pasó con creces la prueba del tiempo, merced a su riqueza orquestal, tan plena en timbres y acentos; con esos diálogos fabulosos entre los metales y las maderas, y ese dejo de música indígena que nos conecta inmediatamente con nuestro pasado prehispánico.
Por su calidad, recordamos las interpretaciones que han hecho de Huapango la Filarmónica de Berlín, en Alemania, dirigida por Plácido Domingo, y la Orquesta Sinfónica Juvenil de Venezuela, dirigida por Gustavo Dudamel en Los Angeles, California, y en el Palacio de Bellas Artes de México.
Por supuesto que no podemos olvidar una de las mejores ejecuciones del llamado segundo himno nacional a cargo del maestro Enrique Bátiz y la Orquesta Sinfónica del Estado de México (OSEM), la cual está en el mismo nivel que las anteriores.
HOMENAJES
La Orquesta Sinfónica de Minería, bajo la batuta de Carlos Miguel Prieto que actúa en este ensamble como director principal , se prepara para realizar un concierto en homenaje a este músico mexicano el jueves 28 de junio en el Auditorio Nacional.
Sobre este acontecimiento, Carlos de la Mora, presidente de la Academia de Música del Palacio de Minería, mencionó recientemente que ese concierto llevará por nombre Moncayo y su época. En el mismo serán interpretadas obras de José Pablo y de otros autores de la época como Carlos Chávez, Silvestre Revueltas y Blas Galindo. El programa del concierto que se da en coordinación con Conaculta y que estará ambientado con fotografías y videos , incluye de manera preponderante obras de Moncayo como Sinfonietta , Zapata: Tierra de temporal , Feria y el famoso Huapango .
Pero hay que decir que la OSEM se adelantó a los homenajes y atinadamente los desplegó a lo largo del primer semestre del 2012; de este modo, la agrupación que dirige el maestro Enrique Bátiz comenzó su homenaje al músico jalisciense con la interpretación de Sinfonía , el 26 de febrero de este año en Texcoco. Luego vendrían otras nueve jornadas en honor del músico jalisciense.
Por su parte, la Orquesta del Instituto Politécnico Nacional ofreció el 31 de mayo y el 2 de junio su concierto Cien aniversario de Moncayo. El ensamble politécnico, bajo la dirección de Gabriela Díaz Alatriste, brindó un programa que incluía: Sinfonietta , Tierra de temporal y Huapango .
También se sabe que han recopilado 29 piezas originales, grabadas y digitalizadas por vez primera, en una sola edición a cargo de Conaculta con la dirección de Lázaro Azar.
En este contexto, era de esperarse un homenaje nacional por parte del Instituto Nacional de Bellas Artes, por ser la institución cultural más importante del país. Pero no fue así. Al revisar su programación musical, sólo aparece que la Orquesta Sinfónica Nacional, que también dirige Carlos Miguel Prieto, ofrecerá en su Concierto 17 el Huapango en dos fechas: el 29 de junio y 1 de julio. También esperábamos una gran puesta en escena de La mulata de Córdoba, mejor que la que vimos hace un año en el Palacio de Bellas Artes.
Aparte del Huapango , la obra de José Pablo incluye otras de gran calidad: Muros Verdes para piano (1951); sus piezas orquestales Amatzinac (1935), Sinfonía (1944), Sinfonietta (1945), Cumbres (1953) y Bosques (1954); el ballet Tierra de temporal (1949) y el Homenaje a Cervantes (1947).
Para quien quiera adentrarse en el mundo de Moncayo están, entre otros, estos libros del maestro José Antonio Alcaraz: La obra de José Pablo Moncayo, Cuadernos de música, UNAM, 1975, y el texto En la más honda música de selva, Conaculta, 1998.
[Nota: Agradecemos a los lectores que nos hicieron notar el error sobre el motivo de las celebraciones a Moncayo. La errata ya se corrigió.]