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Virgin Galactic no podrá realizar vuelos espaciales mientras se investiga percance en nave donde viajó Richard Branson
La FAA confirmó que investiga los detalles de este famoso vuelo por el desvío del aparato de su trayectoria programada originalmente.
La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) indicó este jueves que Virgin Galactic no podrá realizar nuevos vuelos espaciales mientras se investiga por qué el aparato que transportó al fundador de la compañía, Richard Branson, el 11 de julio, se desvió de su trayectoria planificada.
"Virgin Galactic no podrá volver a volar el SpaceShipTwo hasta que la FAA apruebe el reporte final de investigación sobre el percance o determine que el problema no afecta la seguridad pública", informó la agencia federal respecto del vuelo que transportó hasta el inicio del espacio al fundador de la compañía, el magnate Richard Branson, el 11 de julio pasado.
"La aeronave de Virgin Galactic SpaceShipTwo se desvió de su autorización de control de tráfico aéreo mientras regresaba a Spaceport America", la base espacial utilizada por la compañía en el desierto del estado de Nuevo México, señaló la FAA.
La investigación sobre esta irregularidad está "en curso", aseguró la agencia.
Un informe de la revista semanal The New Yorker reveló que alertas de seguridad se encendieron en la cabina de la nave durante su viaje. Posteriormente, la FAA confirmó a la AFP la apertura de una investigación porque el aparato se alejó del espacio aéreo autorizado y dedicado a la misión.
Sin embargo, Virgin Galactic había asegurado en aquel momento que el vuelo se había desarrollado según lo planificado.
Ahora la decisión de la FAA representa un golpe para la compañía espacial privada de Branson, en momentos en que ajusta sus planes para transportar a clientes que pagarán fuertes sumas para viajar después del primer vuelo de prueba con tripulación completa.
Dudas técnicas
No está claro ahora si el próximo vuelo de prueba de Virgin, en el que participarán miembros de la Fuerza Aérea Italiana, se llevará a cabo según lo programado a fines de septiembre o principios de octubre.
El problema en la trayectoria amenazó con comprometer la fase de retorno a la Tierra, cuando la nave espacial VSS Unity, en la que además de los dos pilotos, viajaban Branson y otros tres pasajeros, debió planear hasta aterrizar en una pista de Nuevo México, según The New Yorker.
Según el artículo del periodista de investigación Nicholas Schmidle, los pilotos se encontraron primero con una luz amarilla y luego con una roja, lo que indica que el ascenso del avión espacial era demasiado superficial y la nariz de la nave no estaba lo suficientemente vertical.
Citando fuentes anónimas dentro de la empresa fundada por Branson, la revista neoyorquina especificó que la forma más segura de reaccionar ante estas alertas hubiera sido interrumpiendo la misión.
Sin una acción correctiva, que los pilotos aplicaron, la aeronave no habría tenido suficiente energía para emprender su regreso a la base. La publicación explicó que una luz roja encendida indica un problema grave que podría haber tenido un desenlace fatal.
La aeronave había superado entonces los 80 km de altitud, el punto establecido en Estados Unidos para la frontera espacial, permitiendo a los pasajeros desprenderse de sus asientos y flotar durante unos minutos en ingravidez.
Un fallo habría dañado enormemente la imagen de Virgin Galactic, que había invitado a toda la prensa y a muchos espectadores de prestigio -entre ellos el magnate Elon Musk, dueño de la fabricante automotriz Tesla y de la aeroespacial SpaceX- a este evento retransmitido en directo.
Branson, de 70 años, venció por algunos días al fundador de la gigante Amazon, Jeff Bezos, y su compañía Blue Origin, en una carrera espacial entre multimillonarios.