Propinas “sagradas”: la propuesta de ley que los meseros no quieren

La iniciativa para regular las propinas en México, promovida por el diputado Pedro Haces Barba de Morena, ha abierto un intenso debate entre legisladores, empresarios y trabajadores del sector restaurantero. La propuesta, presentada en diciembre de 2024, busca reformar la Ley Federal del Trabajo para garantizar que los trabajadores que reciben propinas cuenten con un salario base no menor al salario mínimo vigente, considerando las propinas como un complemento adicional y no como su ingreso principal.

La iniciativa también plantea que los patrones no puedan apropiarse ni disponer de las propinas, y que estas se distribuyan equitativamente entre los empleados que las generen. Según el legislador, esta medida beneficiaría a más de 2.2 millones de trabajadores al integrarlos plenamente a la economía formal.

Sin embargo, en una serie de entrevistas realizadas por Bistronomie con meseros de al menos siete restaurantes de distintos precios y sectores gastronómicos de la Ciudad de México, como Au Pied de Cochon, la cantina La Coyoacana, La Mascota, The Capital Grille, La Rural, Tacos El Borrego Viudo, Taquearte, San Ángel Inn y Las Barricas, se revela una opinión unánime: todos los entrevistados están satisfechos con su esquema laboral actual.

Los trabajadores coinciden en que reciben el salario mínimo estipulado por ley, pero lo que verdaderamente hace atractiva su labor son las propinas, que les permiten alcanzar ingresos mensuales promedio de 22,000 pesos. Aseguran que este modelo les otorga una movilidad económica inmediata, ya que reciben efectivo a diario, lo cual facilita su administración financiera.

Un aspecto que destacan todos los meseros entrevistados es la transparencia con la que se reparten las propinas entre el equipo de trabajo. Saben que el dinero recibido, incluso el que se deja a través de tarjeta, es distribuido entre todos sus compañeros de manera justa. No sienten que sus empleadores ni gerentes interfieran de forma negativa en ese reparto. Por el contrario, afirman tener plena confianza en el sistema establecido por cada restaurante.

También, muchos de ellos admitieron no estar informados sobre la iniciativa de regular las propinas ni sobre la posibilidad de que estas se integren a su salario mensual y sean reportadas al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Sin embargo, tras conocer los términos de la propuesta, manifestaron su preocupación por perder el esquema actual que consideran justo, funcional y beneficioso. Ya que de esa manera también pueden tener movilidad laboral e irse a otro restaurante en cualquier momento.

La discusión está sobre la mesa y será crucial incluir en ella las voces de quienes viven del sistema actual de propinas y consideran que funciona bien tal como está.