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Gallos y su estrategia para el éxito mercadológico
Luego de varios problemas económicos, hoy el futuro del club queretano luce prometedor.
Ronaldinho no sólo se convirtió en un refuerzo bomba en la cancha para Querétaro. La llegada del astro brasileño a Gallos Blancos también ha logrado sellar las fracturas que la institución ha sufrido en su historia reciente, ésa que hasta hace algunos meses lo condenaba como una institución inestable, sobre todo en el tema de sus dueños, sin dejar pasar que en el 2013 su irregularidad les cobró un descenso que al final pudieron eludir por la compra de una franquicia.
La inestabilidad del conjunto, propiedad de Grupo Imagen Multimedia en la época más reciente, inició en el 2011, año en el que apareció el empresario croata Zlatko Petricevic, quien fue anunciado como dueño, con las promesas de fichar refuerzos de primer nivel y de cerrar partidos con Barcelona y Real Madrid.
Apenas seis meses más tarde Petricevic tuvo que abandonar a los queretanos tras no poder comprobar el origen de sus recursos económicos ante la Liga MX.
El descenso en el 2013 y la llegada de Amado Yáñez, quien compró al equipo y evitó su caída a Segunda División con la compra de Jaguares, trajeron tranquilidad que duró apenas nueve meses, antes de que el club fuera asegurado por SAE, debido a irregularidades financieras de la empresa Oceanografía, propiedad de Yáñez.
Tras rumores que indicaban la desafiliación del club, el SAE se encargó de administrarlo hasta que apareció Grupo Imagen como comprador, unos días después de que el empresario Miguel Ángel Sánchez convocara a los medios para presentarse como dueño, situación que nunca avaló la Liga MX.
Con Olegario Vázquez Aldir como dueño, el equipo recuperó la tranquilidad y dio la nota con el fichaje de Ronaldinho, mismo que generó insultos racistas y que motivaron que la directiva exigiera sanciones para el responsable.
Si bien Gallos habían dado de qué hablar con el astro brasileño, la semana pasada volvieron a destacar por cosas nada gratas: ocho jugadores fueron separados del primer equipo argumentado bajo rendimiento.
Jorge Badillo Nieto, docente de las maestrías en Nutrición Deportiva y Fisioterapia Deportiva en la UVM, así como creador de Fusión Mercadotecnia Deporte, habló con El Economista y aseguró que a pesar de la turbulenta historia reciente de Querétaro en las últimas semanas el impacto que el club ha logrado en el mercado tiende a verse más desde la perspectiva de contar con un jugador de élite como Ronaldinho y el resultado momentáneo es un alto grado de exposición , explicó el especialista.
Badillo destacó que con un jugador de élite entre sus filas, Gallos Blancos provocó el escenario perfecto para sus patrocinadores, como las Gasolineras Osran y Prisma, así como para Tecate y Coca Cola, quienes ahora tienen una exposición internacional.
El especialista en mercadotecnia deportiva y catedrático de la UVM explicó que a pesar de los malos momentos que ha vivido el conjunto, que ahora es dirigido por Ignacio Ambríz, no corre ahora mismo el riesgo de negociar y renegociar contratos con sus patrocinadores, ya que la llegada de Grupo Imagen ha generado certidumbre y Ronaldinho es un imán que quieren aprovechar.
En el patrocinio deportivo se debe priorizar permanentemente la creación de relaciones sólidas, a largo plazo , agregó Jorge, quien finalmente indicó que con todo y la presencia de un crack como el brasileño, Querétaro debe actuar de manera ejemplar en cuanto al tema de la disciplina para transmitir seriedad a sus socios.
Con ello, implícitamente se envía un mensaje de seriedad a los patrocinadores para que éstos sigan manteniendo su confianza en la institución y así no se pongan en riesgo los acuerdos , detalló Badillo Nieto.
En Querétaro no sólo atinaron con traer a un jugador de la calidad de Ronaldinho que les ayude a destacar en la cancha y a llenar el estadio, sino también el brasileño ha contribuido para ir haciendo olvidar la inestabilidad que había acompañado a la institución en los últimos años. Ahora sólo está en Dinho mostrar aún más su valía con su talento en la cancha que en los escritorios.
