Lo más difícil es tener paciencia

Eduardo Herrera recuerda con melancolía aquel año fuera de Pumas, cuando tomó el riesgo de buscar mayor participación y consolidar una carrera que nunca fue sencilla. El delantero llegó hasta el llanto cuando las oportunidades escaseaban y el torneo transcurría desde la banca, ese parece ser el destino de los delanteros mexicanos en la Liga MX.

Los atacantes extranjeros son titulares en 75% de los puestos disponibles en los equipos, por lo que Eduardo dice sentirse como uno de los pocos privilegiados que juegan y desea seguir con ese rumbo.

En lo que va del ciclo 2014-2015, Herrera ha marcado 18 goles en 28 juegos de liga y copa. Es uno de los delanteros mexicanos con mayor rendimiento, sólo detrás de Oribe Peralta, y Miguel Herrera confirmó su primer llamado a la Selección mexicana. El atacante explica los desafíos de los futbolistas que, como él, buscan más oportunidades para consolidarse.

¿Cómo te sientes luego de ser uno ?de los delanteros con más goles en los últimos dos torneos?

Es un paso que yo tenía pensado dar y eso me motiva para seguir trabajando y aprovechar la oportunidad que me dan de jugar, ya que no hay muchas oportunidades y normalmente la posición es ocupada por delanteros extranjeros. Soy uno de los pocos privilegiados que está teniendo oportunidad regularmente y quiero seguir aprovechándola.

¿Qué tan difícil es ganarse un lugar como titular en el futbol mexicano, sobre todo en una posición donde, como bien dices, juegan los delanteros extranjeros?

Es bastante complicado. Yo tuve que salir un año a Santos y me sirvió mucho para tomar experiencia y aprender en muchos aspectos. Como delantero tienes mucha responsabilidad y, principalmente, se les otorga esa responsabilidad a jugadores extranjeros. Estoy consciente que no hay muchas oportunidades para delanteros mexicanos y, por lo mismo, me siento afortunado y motivado para seguir haciendo las cosas bien.

Lo difícil es tener paciencia. Es complicado cuando estás entrenando a tope, llega el fin de semana, y ves que no vas a tener oportunidad o será escasa; eso se sufre. El último semestre en Santos no tuve tanta actividad y me desesperaba mucho, llegué al borde de que acabando los partidos me daban ganas de llorar, de la impotencia de no tener participación.

¿Cuál fue tu motivación para salir de esos momentos?, porque no acabó ahí, a tu regreso a Pumas tampoco los minutos fueron bastantes.

Cuando regresé a Pumas tenía muy claro que quería jugar y tratar de aprovechar las oportunidades que tuviera, porque son pocas. En los entrenamientos me daba cuenta de que podía competir y de que estaba haciendo las cosas bien. Además, fue un semestre de mucho aprendizaje (en Santos), porque estuvimos jugando Copa Libertadores, viajando a Sudamérica y se aprende mucho. Fue mi primera experiencia en torneo internacional.

¿Qué característica hace singular al delantero mexicano o por qué no existen goleadores nacionales peleando el liderato de goleo cada torneo?

Como delanteros, no es que los mexicanos tengan ciertas cualidades en especial, yo creo que depende de las características físicas y técnicas. Veo a muchos jugadores mexicanos con distintas características para poder hacerlo bien, es cuestión de dar esa oportunidad y continuidad, y seguramente surgirán más delanteros.

¿Ha afectado al futbol mexicano que no se limite el número de futbolistas no nacidos en México?

Se ha visto que en los últimos torneos, por lo mismo del reglamento, ha habido más jugadores extranjeros. La competencia cada vez es más fuerte y creo que esperan incrementar el nivel de la liga; pero las oportunidades de los mexicanos serán menores. Como mexicanos tendremos que elevar el nivel y luchar para destacar.

A ti te costó mucho debutar, casi ?lo hiciste a los 23 años. ¿Por qué no se confía en los jóvenes delanteros mexicanos?

Es una posición en la que asumes un rol de mucha responsabilidad y yo creo que ha de ser difícil para los directivos y cuerpo técnico darle ese rol a un jugador que no tiene tanta experiencia. Lo ideal es debutar antes, me hubiera gustado debutar como otros compañeros, a los 18 o 19 años, pero no creo que perdí esos años, porque estuve jugando en Liga de Ascenso y me dio un bagaje y experiencia para cuando debutara, no esperar mucho tiempo en tener apariciones constantes.