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Toluca FC: recomposición para salir del infierno
Tras haber pagado una multa millonaria por su bajo rendimiento en la Liga MX, los Diablos Rojos tomaron el descanso para reajustarse deportiva y estructuralmente.
Ni el propio diablo pudo soportar la condena del fondo del averno. Esa es la situación que están padeciendo los Diablos Rojos del Toluca, un equipo que se acostumbró a tener una racha ganadora con presencia en 11 finales de Liga MX entre 1998 y 2018, pero que en los últimos cuatro años bajó tanto su rendimiento hasta colapsar al cierre de la temporada 2021-22 con el pago de una multa millonaria por ocupar uno de los peores puestos de la tabla porcentual.
Los Diablos del Estado de México concluyeron dicha temporada con un porcentaje de 1.1650, tras haber obtenido apenas 120 puntos en sus últimos seis torneos (un promedio de 20 por cada uno) y se ubicaron como el antepenúltimo equipo más flojo de la tabla de cociente del futbol mexicano, obligándolos a pagar 33 millones de pesos a la Liga MX para mantener su posición en Primera División.
Esto marca uno de los peores momentos en la era moderna del Toluca FC. Pese a ser uno de los siete equipos que desde que llegó a Primera División nunca ha descendido (junto a América, Chivas, Pumas, Cruz Azul, Santos y Tijuana), no estaba involucrado en la temática de los peores lugares de la tabla desde mediados de los 90, antes de la época gloriosa de tres títulos (en los veranos de 1998, 1999 y 2000) bajo la dirección técnica de Enrique Meza.
“Esto es un hecho inédito. Sí extraña lo que ocurre en Toluca en el sentido de que no es una posición habitual para ellos estar en los últimos lugares de la tabla, tanto en la porcentual como en la general. Fue extraño verlo pagar la multa y resultó como el disparador para que esta temporada y las subsecuentes el equipo busque una mejor posición deportiva”, comenta Francisco San José, catedrático de Mercadotecnia Deportiva de la Escuela de Ciencias del Deporte de la Universidad Anáhuac.
El pago de la multa a inicios de mayo caló en el seno escarlata. Palabras como vergüenza y renuncia se hicieron presentes en el discurso de los altos mandos y a partir de ahí se tomaron las decisiones para intentar apagar el infierno lo más pronto posible, a partir del torneo Apertura 2022, que inicia este 1 de julio.
“O le cambiamos la cara al club en los siguientes seis meses o nos tenemos que ir todos. Se tomarán acciones sin precedentes (…) Lo que se ve no se juzga, nos hemos equivocados en las decisiones, es la realidad. Tratamos de apostar a las fórmulas, con perfiles diferentes, jugadores y técnicos y aquí está la realidad y hay que aceptarla. Lo números son fríos”, calculó Francisco Suinaga, presidente del equipo, en conferencia posterior al cierre de la temporada 2021-22.
En menos de un mes, el Toluca sumó cinco refuerzos de cara al Apertura 2022: el portero brasileño Tiago Volpi, procedente del Sao Paulo; el central colombiano Andrés Mosquera, el lateral derecho mexicano Fernando Navarro y el extremo izquierdo chileno Jean Meneses, todos provenientes del Club León; y el volante mexicoamericano Sebastián Saucedo, quien llegó de Pumas. Es una quinteta de nueve millones de euros de valor de mercado (según Transfermarkt).
“No podían quedarse de brazos cruzados y solo había dos caminos: pensar que Ignacio Ambriz (el entrenador) no había funcionado y destituirlo o confiar en él. Se dieron cuenta que había ciertos jugadores que no estaban cumpliendo y que había que reforzar ciertas posiciones y es justamente lo que han hecho. Dada la continuidad de Ambriz, decidieron que fuera él quien trajera a los nuevos jugadores y por eso ha apelado a quienes conoció en su etapa en León”, destaca Francisco San José.
Entre 2019 y 2021, Toluca adquirió a cuatro de las seis transferencias más altas de su historia con nombres como los de Michael Estrada o Emmanuel Gigliotti, por quienes el club pagó 5.7 millones de euros y no dieron el rendimiento esperado. También llegaron jugadores con cartel como Jonathan Maidana, Federico Mancuello y Diego Rigonato, pero se fueron con más pena que gloria.
Esta vez, además de los cinco refuerzos ya mencionados para el Apertura 2022, el Toluca FC decidió aliarse con Driblab, una compañía de origen español especializada en el manejo de big data para reclutar futbolistas. “Hemos alcanzado un acuerdo de colaboración multianual para integrar la estadística avanzada en los procesos de búsqueda de talento y análisis de rendimiento, complementando el trabajo de la dirección deportiva y el departamento de scouting”, anunció la empresa a principios de junio.
“Es una empresa que tiene presencia con varios clubes de la Liga MX, un ejemplo fue el fichaje de Federico Viñas con el América, que fue una recomendación directa de Driblab. Esto puede ayudar a poner al Toluca como un club más a la vanguardia, en la última fila para hacer mejor las cosas, ya que es un equipo que está en etapa de recomposición”, agrega el catedrático de Mercadotecnia Deportiva.
El proyecto de Ignacio Ambriz al frente del Toluca tiene una visión hasta 2026, según han reconocido Francisco Suinaga y Antonio Naelson ‘Sinha’, el director deportivo. La primera misión de Ambriz y de sus renovados fichajes será alejarse lo más posible de la zona de las multas (últimos tres lugares de la tabla de cocientes), partiendo desde el puesto número 13 de 18 (Mazatlán, Necaxa, Tijuana, Querétaro y Juárez empezarán debajo del Toluca la temporada 2022-23).
De acuerdo con el especialista en Sports Marketing, la mala racha deportiva del Toluca no provocó mayores problemas en cuanto a su capacidad para generar acuerdos comerciales. Aunque tardó un semestre sin patrocinador principal en el jersey (en el Apertura 2020), ha sumado a marcas como Roshfrans, Caliente, Driblab y Arabela (en el caso del equipo femenil) en el último año y medio.
“Da la impresión de que las relaciones comerciales no han sido dañadas o no con la misma magnitud que en la parte deportiva, porque siguen teniendo patrocinadores, reteniendo e incorporando a otros. No veo un daño fuerte a la forma de conseguir apoyos porque los fundamentos del Toluca son bastante sólidos: su número de títulos, las cifras de sus aficionados fieles, hay equipos que son muy volátiles de un año a otro y el Toluca se mantiene, se le reconoce su perfil de seriedad, de ser un equipo profesional, bien gestionado, que no se presta mucho a escándalos y que prefiere no hacer ruido en ese sentido”.
En otra rama de sus ingresos, el Toluca todavía no ha vendido el 100% de sus abonos para el torneo Apertura 2022, que van desde los 2,000 hasta los 8,500 pesos por uno nuevo o de los 1,700 a los 7,400 por renovación, ya que constantemente suben la imagen para promover sus costos en sus redes sociales.
La afición demostró su molestia hacia el equipo al final del torneo pasado (Clausura 2022) debido a los malos resultados que incluyeron derrotas abultadas en casa. Por ejemplo, la asistencia decayó de 22,438 en la jornada 6 a 10,766 en la jornada 16, que fue el último partido del Toluca jugado en el estadio Nemesio