Diputados reinician debate de tercer dictamen energético

A las 12:24 horas de este miércoles, la Cámara de Diputados reinició la sesión de su periodo extraordinario para debatir y en su caso aprobar el tercer dictamen de las leyes secundarias de la reforma energética.

El presidente de la Mesa Directiva, José González Morfin, informó que se presentaron 13 mociones suspensivas por parte del PRD, PT y Movimiento Ciudadano, quienes con esa medida buscan que se devuelva a comisiones el dictamen que se discutirá este miércoles, referente al dictamen que expiden la Ley de Petróleos Mexicanos y la Ley de la Comisión Federal de Electricidad, y se reforman y derogan diversas disposiciones de la Ley Federal de las Entidades Paraestatales; la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público, y la Ley de Obras Públicas y Servicios Relacionados con las Mismas.

Sin embargo, el diputado Marco Antonio Bernal (PRI) dijo que el debate se desarrollará y no habrá cambios al dictamen respecto a lo ya aprobado por las comisiones de la Cámara de Diputados.

En tribuna, Marco Antonio Bernal, presidente de la Comisión de Energía, dijo que ese dictamen fortalece a Pemex y la Comisión Federal de Electricidad para que puedan competir exitosamente en sus sectores con apoyo de la iniciativa privada.

Destacó cinco ejes que busca el dictamen: que tanto Pemex como CFE sean empresas productivas con un régimen jurídico especial donde el Estado mexicano será propietario, pero dejará de ser administrador.

Se regirán por un gobierno corporativo, con un marco legal flexible, y un rediseño integral de esquemas de vigilancia y auditoria, con nuevos mecanismos de transparencia y rendición de cuentas.

Afirmó que las empresas seguirán siendo propiedad exclusiva del gobierno federal, aunque se busca un diseño sin camisa de fuerza para ambas empresas.

En contraste, el diputado Roberto López González (PRD) dijo que lejos de fortalecer a CFE y Pemex, serán las empresas privadas las que tengan mayores beneficios económicos.

Dijo que la CFE competiría con las empresas privadas, pero sus decisiones estarán sujetas a lo que determinen los órganos regulares. Añadió que se reducir su margen de maniobra presupuestal, y se da un control a la Secretaría de Hacienda para que se privilegien a las empresas privadas de generación de energía.

Alertó que será una política energética a criterio del Presidente en turno, porque los integrantes del Consejo de Administración serán nombrados por él, por lo que buscará que sus decisiones privilegien los negocios y no el bienestar de los ciudadanos.

En ese marco, comenzó la discusión del tercer dictamen de la reforma energética, y se espera que concluya la madrugada del jueves.

jmonroy@eleconomista.com.mx

mfh