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La CFE está preparada para competir
En el segundo semestre habrá nuevas licitaciones de gasoductos, la reforma detonará una ola de nuevas inversiones , anticipa el máximo funcionario de la empresa.
El nuevo marco legal del sector energético permitirá detonar nuevas inversiones. La Comisión Federal de Electricidad (CFE) lanzará nuevas licitaciones para la construcción de gasoductos en el segundo semestre del 2014. Éstas serán adicionales a los 2,800 millones de dólares que implican los gasoductos anunciados recientemente.
Las nuevas posibilidades de inversión son parte de la transformación que vivirá el sector eléctrico y la CFE. Éramos una empresa eléctrica. Con la reforma seremos una empresa de energía que competirá en nuevos mercados y que tendrá nuevos competidores , dice el director de la CFE, Enrique Ochoa Reza. La transparencia será un instrumento fundamental para lograr la eficiencia, el know how será más importante que el know who , indica. Se terminará con el monopolio que hoy es la CFE en electricidad y en gas habrá una mayor concurrencia de empresas interesadas en el desarrollo del negocio energético. No habrá un dominante de nuevo, tendremos un sistema de competencia. Estamos preparados , dijo.
En entrevista con El Economista, explica que eso detonará un gran cambio, para la empresa y para el país. La CFE no podía vender gas natural en el mercado abierto, pese a que la ley permite la libre importación del energético así como su distribución. Las empresas eléctricas de todo el mundo comercializan gas natural, las más grandes lo hacen y la CFE no estaba facultada para ello , dijo. Además de las facultades, contará con la infraestructura física para hacerlo.
En el contexto del Plan Nacional de Infraestructura, la CFE licitará los contratos de capacidad de gas para la construcción de cinco gasoductos que se suman a los de Pemex y se llegará así a los 16,000 kilómetros de red, explicó. Hasta ahora, el excedente de gas natural que tenía la CFE se lo tenía que revender a Pemex. En todo el mundo la práctica es que este excedente se coloca en el mercado y se consume con otros particulares, eso no se puede hacer en México hoy en día pero sí se podrá hacer en cuanto se aprueben las nuevas leyes secundarias .
Todos estos ductos estarán operando en principio en un esquema de temporadas abiertas, para que además de la CFE haya más de un usuario que esté interesado en usar la capacidad del ducto y que esta necesidad se sume a la de las centrales eléctricas de tal forma que sirva como un eje de desarrollo para la actividad económica.
La temporada abierta es la capacidad que otorga la Comisión Reguladora de Energía (CRE) para que el dueño de los ductos pueda buscar más clientes que requieran sus servicios, una vez que los tenga deberá de dar aviso a la CRE y el Centro Nacional de Control de Gas garantizará que el acceso a los usuarios sea de manera indiscriminada.
EU, A AÑOS LUZ DE DISTANCIA
A pesar de la inversión y el crecimiento de la red de ductos, todo México tiene menos capacidad que el estado de Texas, reconoce Ochoa Reza. En total, la red de gasoductos en México es menos de 3% la de Estados Unidos. Lo más importante es que estamos trabajando para reducir esa brecha. Lo que tenemos ahora no es un sistema nacional de ductos , reconoce. El funcionario tiene claro que se requiere la creación de sistemas regionales de gas y que éstos, a su vez, se puedan conectar a un sistema nacional que mejore el mallado del país.
Hoy, con las licitaciones de la CFE, más las que construyeron los privados y los proyectos de Pemex, como son Los Ramones, se espera llegar a la cantidad de 16,500 kilómetros de ductos, pero en realidad esta cifra es mucho menor a la que se puede tener ya con la participación de nuevos operadores privados y sus planes de desarrollo, así como el crecimiento de la demanda de energía esperado.
Explicó que en los últimos 12 años se dejaron de construir gasoductos pese a que la demanda de gas de la CFE y de los privados iba en crecimiento y, por otro lado, decayó la producción nacional. La combinación de ambos generó las alertas críticas que han sido manejadas y se desataron las alertas críticas. Eran un tema recurrente hace dos años. No hemos vuelto a tener alertas críticas. Eso implica gran capacidad de ejecución, de esta empresa, de sus trabajadores .
CAMBIOS ESENCIALES PARA LA CFE
- Deja de pagar aprovechamientos, ahora están sujetos a un pago del Impuesto Sobre la Renta (ISR).
- Pueden hacer negocios de energía en asociación con otras empresas.
- El manejo de los ductos que le prestará el servicio a la empresa será regulado por el Centro Nacional de Control del Gas y la política energética queda en manos de la Secretaría de Energía.
- Las tarifas eléctricas que la CFE cobrará a los usuarios serán definidas por la Comisión Reguladora de Energía.
- Los subsidios en el sector eléctrico quedan en manos de la Secretaría de Hacienda.
BUSCAN ALIANZAS PARA REDUCIR PÉRDIDAS
La CFE busca alianzas o proveedores para reducir pérdidas de energía. La empresa eléctrica tiene un promedio de pérdidas de 15 por ciento. En ese promedio incluyen más de 20% en la zona metropolitana de la ciudad de México y 8% en Monterrey. Se compara con el promedio de la OCDE, que es 6% y con el caso más exitoso del mundo, KEPCO, de Corea del Sur.
Estamos abiertos para encontrar soluciones. Es un problema que cuesta millones de pesos diarios y lo que consigamos se notará mucho , dice Enrique Ochoa. Hace unos días vinieron unos empleados de la CFE del norte, nos mostraron una solución interesante. Haremos alianzas con empresas, ya tuvimos conversaciones con la empresa de Corea .
El año pasado, la CFE tuvo ventas por más de 318,000 millones de pesos, pero hubo una pérdida neta de 37,000 millones de pesos, es decir, hubo dos récords en ambos sentidos, y lo que se ha buscado este año es atacar estos dos puntos para reducir los costos de operación de la compañía. En el primer semestre del 2014, se logró un crecimiento de ventas de 4%, para alcanzar los 161,390 millones de pesos, frente al mismo periodo del año anterior. Ha habido una reducción de las pérdidas de 61%, frente al periodo de referencia, al reducirse de 35,519 millones a 13,900 millones. En esta reducción de las pérdidas, las lluvias han sido un factor, pues su abundancia ha impulsado la generación hidroeléctrica.
El concepto de pérdidas incluye dos grandes categorías: técnicas, por calor dada la distancia que se debe de recorrer entre la central y el punto de consumo, y no técnicas, donde se clasifica el robo de energía en puntos urbanos y semiurbanos más la cultura del no pago en ciertas zonas de consumo como la zona metropolitana del valle de México o Tabasco.