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Proyectan primer desarrollador institucional de parques industriales en Jalisco
La compañía Kampus Desarrollos construye un proyecto de 30 hectáreas en Ixtlahuacán de los Membrillos con una inversión de 60 millones de dólares provenientes de dos fondos canadienses.
Guadalajara, Jal. No obstante el crecimiento que ha tenido el sector en los años recientes, Jalisco no cuenta con un desarrollador institucional de parques industriales que represente a la entidad, afirmó el CEO de Kampus Desarrollos, Bruno Martínez.
Están desarrollos industriales de Querétaro, de México, Tijuana, Monterrey o Chihuahua, que no solamente desarrollan en sus estados sino que lo hacen en otras entidades, incluyendo Jalisco. Entonces, nuestra visión es que en cinco años, nosotros tenemos que ser el desarrollador institucional de Jalisco”, comentó.
En entrevista con El Economista, el empresario indicó que los desarrolladores institucionales tienen, entre otras características, que su financiamiento proviene de fondos institucionales internacionales.
Actualmente la compañía construye a través de un joint venture con dos fondos canadienses, el proyecto Kampus Industrial Santa Rosa en el municipio de Ixtlahuacán de los Membrillos, en el corredor Chapala-Guadalajara.
Se trata de un complejo de 30 hectáreas con tres edificios que en una primera etapa suman en conjunto 90,000 metros cuadrados y una inversión de 60 millones de dólares.
Diferenciador
De acuerdo con el CEO de Kampus Desarrollos, mientras la mayoría de los desarrolladores construyen naves industriales a la medida, el valor agregado de esta compañía es que fue pionera en el desarrollo especulativo.
“Nuestro valor agregado es que normalmente, los desarrolladores buscan primero encontrar el cliente y luego construir; nuestra estrategia es desarrollar de manera especulativa, desarrollamos los edificios lo más estándar posible y ya a los dos o tres meses que empezamos a terminar el edificio, llega el inquilino y se renta”.
Martínez Zurita afirmó que en este momento están llegando a Jalisco inquilinos de empresas chinas, taiwanesas, japonesas, estadounidenses y canadienses, tanto de logística como de manufactura ligera.
“Este nearshoring lo estamos viviendo. Actualmente, estamos construyendo 50,000 metros cuadrados entre los dos edificios y ya tengo interés de varios inquilinos que, entre todos, demandan 150,000 metros cuadrados. Entonces, yo voy a atender la demanda de 50,000 y van a quedar 100,000 que tendrán que recolocarse en algún otro estado”, puntualizó.