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Sequía se agrava en presas de Querétaro
Al corte del 4 de abril, las siete principales presas de Querétaro se encontraban a únicamente 5.4% de su capacidad de almacenamiento, manteniendo al estado con el nivel más bajo de agua, entre las 26 entidades que concentran las 210 principales presas del país, de acuerdo con reportes de la Conagua.
Querétaro, Qro. El impacto de la sequía en las presas del estado se agrava debido a la escasez de lluvias que afecta al estado desde el año pasado, refirió el secretario de Desarrollo Agropecuario (Sedea) de Querétaro, Rosendo Anaya Aguilar.
Hasta el 5 de abril, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) reportó que las 26 presas del estado se encontraban a 13% de almacenamiento; y al menos tres estaban completamente vacías: Jesús María (en El Marqués), La Llave y Derivadora Constitución de 1857 (en San Juan del Río).
“Se está agudizando más el tema de la sequía en las presas, una de las más grandes que tenemos es la presa Constitución, esa presa realmente ya está en el nivel más bajo, prácticamente ya no tiene (agua)”, expuso.
Al referir pronósticos de la Conagua, Anaya Aguilar agregó que será en mayo cuando inicie la temporada de lluvias, confiando en que atenúe las condiciones de sequía que enfrenta la entidad.
Las zonas afectadas han optado por usar agua de pozos. Mientras que la estrategia estatal, se centra en brindar apoyos; tras terminar la entrega de maíz, en próximos días se lanzará un programa para entregar pacas a ganaderos.
Hasta ahora, aseguró que las asociaciones ganaderas locales no han reportado muerte de ganado a causa de la sequía.
El titular de Sedea refirió que la entidad se encuentra entre sequía severa y moderada, impactando principalmente a los municipios serranos y semidesérticos.
No obstante, la zona de riego número 23 es una de las más afectadas, misma que abarca principalmente a San Juan del Río y Pedro Escobedo, pero también una región de El Marqués; agregó que en esta área hay cerca de 2,000 productores agropecuarios, principalmente agricultores.
Rosendo Anaya recordó que la lluvia que se presentó a finales del 2021 permitió que en estas mismas fechas del 2022 las presas contaran con agua suficiente para actividades de riego y para fungir como abrevaderos.
“En 2022 llovió muy poco en comparación con 2021 tuvimos alrededor de 50 y 60% del porcentaje de agua que cayó con respecto al año anterior, eso es lo que hoy trae una dificultad, evidentemente tenemos que buscar la manera de aliviar esa situación”, expuso.
Los productores de temporal, mencionó, aún están a tiempo de iniciar sus ciclos productivos, aunque están a la espera de que a más tardar en mayo inicie la temporada de lluvias. En el estado hay registro de aproximadamente 130,000 hectáreas de temporal, de las cuales 80,000 aún están activas y esperando condiciones para riego.
“Es justamente el tiempo en el cual ya deberían estar preparándose, incluso en algunos casos en años anteriores ya es tiempo en que han sembrado, en este momento evidentemente que están esperando la llegada de las lluvias”, agregó.
Al corte del 4 de abril, las siete principales presas de Querétaro se encontraban a únicamente 5.4% de su capacidad de almacenamiento, manteniendo al estado con el nivel más bajo de agua, entre las 26 entidades que concentran las 210 principales presas del país, de acuerdo con reportes de la Conagua.