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Yucatán, vulnerable a perder posiciones
Tiene débiles bases estructurales debido a su actual proceso de reconversión productiva.
Los estados de Yucatán, Jalisco, Colima, Coahuila y Michoacán tienen mayores probabilidades de perder lugares en competitividad, de acuerdo con la EGAP Gobierno y Política Pública y el Instituto para el Desarrollo Regional del Tec de Monterrey.
De forma paralela al Indicador de Competitividad Global 2012, los institutos elaboraron para los 32 estados el Índice de Estructura 2012. Con él, se busca evaluar aquellos factores de mediano y largo plazo que no cambian tan rápidamente (como en el indicador global) y que determinan en gran medida las bases competitivas con que cuenta cada estado.
El Índice de Estructura descansa sobre cuatro pilares principales: recurso humano calificado y remunerado, marco institucional eficiente, capacidad productiva y de innovación, y finanzas públicas sanas. Todos ellos, de acuerdo con los criterios del Tec, no son tan afectados por coyunturas, lo que los convierte en fortalezas intrínsecas de cada estado.
A mayor separación entre el Indicador de Competitividad Global 2012 y del Índice de Estructural, indica que se cuenta con menos elementos para conservar una posición competitiva en el ranking.
En este sentido, Yucatán, en la posición 17 del índice de Competitividad Global 2012, está en el lugar 24 del Índice de Estructura.
Con una diferencia negativa de siete escaños entre el primer y segundo indicador, lo que la coloca como la entidad más vulnerable.
De misma forma, Jalisco también cuenta con siete escaños de diferencia entre ambos indicadores, pero se encuentra en una posición más elevada de competitividad. Colima, Coahuila y Michoacán, por su parte, cuentan con una diferencia de cinco lugares.
RECONVERSIÓN ECONÓMICA
Marcia Campos Serna, coautora del trabajo, expuso que el hecho de que la calificación del 2012 de Yucatán resulta más elevada que la estructural se debe principalmente a la migración paulatina del estado de los sectores agropecuarios al de servicios, con relativo éxito. Por tanto, en un futuro puede estancarse o perder posiciones ya que no cuenta con bases tan robustas sobre las cuales seguir creciendo.
La académica comentó que resulta fundamental que los estados busquen desarrollar sus vocaciones naturales sin despegarse de sus verdaderos alcances, para no perder el rumbo en expediciones económicas infructuosas.
En el otro lado de la moneda, Chihuahua cuenta con el lugar 14 en el Ranking de Competitividad Global 2012, mientras que es el estado número seis en el Índice de Estructura. Debido a lo anterior, el segundo indicador sobrepasa por ocho escaños al primero.
Por lo que tiene más capacidades de subir posiciones independientemente del lugar donde esté.
Este indicador es clave para entidades que buscan mejorar su competitividad de manera sustentable dando a su población mejor calidad de vida , refiere el trabajo.
erick.ramirez@eleconomista.com.mx
