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Cómo dinero estadounidense llega al Talibán
El Péntago afirmó que parte de un contrato mayor a los 2,000 millones de dólares en Afganistán terminó en manos de los insurgentes talibanes.
Una profunda investigación, encabezada por el sector militar, concluyó que recursos de los contribuyentes estadounidenses han sido indirectamente canalizados al Talibán en un contrato de transportes en el que EU ha auspiciado el fomento de negocios afganos.
La investigación, que aún no se hace pública, parece aportar evidencia definitiva de que la corrupción desvía fondos estadounidenses para el transporte hacia manos enemigas, una conclusión que es consistente con anteriores indagatorias del Congreso, de diversas agencias federales y de las Fuerzas Armadas.
Los esfuerzos estadounidenses y afganos para corregir el problema han sido lentos e ineficaces y las empresas coruptas siguen en la nómina. En marzo, el Pentágono extendió todos los contratos por seis meses.
Según una síntesis de la investigación revisada por The Washington Post, los investigadores encontraron evidencia documentada y creíble de apoyo al enemigo por parte de cuatro de los ocho contratistas. También se citan casos específicos de fraude, lavado de dinero y sobornos a intermediarios, funcionarios y policías afganos. En seis de los contratistas se encontrarondocumentación y comportamientos fraudulentos.
La síntesis del informe cita que la ruta del dinero es a través de un laberinto de subcontratistas e intermediarios. En una operación típica, los subcontratistas depositan en la cuenta de un Comandante de la Policía Nacional, quien a su vez deposita dinero a los insurgentes.
