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Extranjeros asesoraron a candidatos en el 2014
La empresa proporcionó a sus empleados extranjeros documentos de inmigración imprecisos para entrar en EU y demostrar que no trabajarían.
Londres. Exempleados de la compañía británica Cambridge Analytica, que está en el centro de un escándalo por obtener de manera irregular datos de unos 50 millones de perfiles de Facebook para fines electorales en EU, dijeron que la empresa asignó a decenas de ciudadanos no estadounidenses la estrategia de campaña y el asesoramiento de comunicación de candidatos republicanos en el 2014.
Las asignaciones se produjeron en medio de esfuerzos por presentar a la compañía recién creada como “una marca estadounidense” que atraería a clientes políticos de ese país a pesar de que su matriz, SCL Group, tenía su sede en Londres, según el anterior director de investigación de Cambridge Analytica, Christopher Wylie.
Wylie, que apoyó la campaña electoral del presidente Trump en el 2016, mostró al Post documentos, según los cuales, se llevó a cabo un programa llamado Proyecto Ripon en varios estados de EU con el objetivo de promocionar las campañas de los republicanos, utilizando perfiles psicológicos para llegar a los votantes con mensajes personalizados.
De acuerdo con regulaciones de EU, los extranjeros no pueden participar “directa o indirectamente en el proceso de toma de decisiones” de una campaña política, aunque pueden desempeñar papeles menores. Esas restricciones fueron explicadas y notificadas en un memorándum de 10 páginas elaborado en julio del 2014 por el abogado de Nueva York, Laurence Levy, a la directiva de Cambridge Analytica, para ese entonces integrada por la presidenta Rebekah Mercer, el vicepresidente Stephen K. Bannon (exasesor presidencial de Trump) y el director ejecutivo Alexander Nix.
Según Wylie y otros dos extrabajadores de la firma que hablaron con el Post bajo anonimato, Cambridge Analytica y SCL Group emplearon al menos a 20 ciudadanos no estadounidenses, principalmente canadienses, británicos y europeos, que desplegaron en todo EU para trabajar en campañas legislativas y del Congreso.
Muchos de esos empleados y contratistas participaron para ayudar a decidir a qué votantes orientar sus mensajes políticos y qué mensajes enviarles, dijeron los extrabajadores. Sus tareas abarcaron toda la gama de trabajo de campaña, incluida la “gestión de relaciones con los medios de comunicación”, así como la recaudación de fondos, eventos de planificación y la asesoría en “temas de conversación, discursos (y) preparación de debates”, de acuerdo con los documentos internos de la empresa mostrados por Wylie.
El lunes padado, investigadores de la Oficina del Comisionado de Información británica (ICO, en inglés) registraron durante siete horas las oficinas de Londres de Cambridge Analytica, menos de una hora después de que un juez del Tribunal Superior del Reino Unido aprobara la petición de registro.