Lectura 4:00 min
Acciones de Tiffany suben de la mano de su balance
Gracias a su marca diferenciada, tiene márgenes de beneficios sobre ventas del 57.60% a nivel bruto y del 19.20% en el operativo.
Las ganancias de Tiffany (TIF) superaron con creces las expectativas de los analistas la semana pasada, en un contexto en el cual muchas empresas ligadas al consumo están mostrando debilidad. Esto se debió al crecimiento que tuvieron sus ventas en Asia, una variable clave a tener en cuenta de cara al mediano plazo.
Con más de 280 tiendas alrededor del mundo, ocupa un lugar de liderazgo en el negocio de joyería y accesorios de moda de alta gama. A su vez, se beneficia de un valor de marca diferenciado que le permite obtener precios más caros a los de la competencia, característica poco habitual en la industria.
Gracias a su marca diferenciada, tiene márgenes de beneficios sobre ventas del 57.60% a nivel bruto y del 19.20% en el operativo. Esto se debe a que suele dejar de lado los descuentos y promociones que otros competidores aplican para gestionar sus inventarios.
La empresa opera en un negocio de consumo discrecional, lo que implica una facturación y ganancias volátiles ante las oscilaciones económicas. El contar con una base de clientes de poder adquisitivo sensiblemente más alto que el promedio le genera cierta protección ante las recesiones que, generalmente, afectan con mayor crudeza a los sectores medios y bajos.
En los últimos meses, el rubro de consumo discrecional ha mostrado debilidad tanto en ventas como en beneficios. Por eso, su reciente reporte de resultados es alentador en comparación con otras empresas de la industria.
La facturación de Tiffany creció el 7% en el trimestre terminado en octubre hasta los 911 millones de dólares y, si se excluye el efecto de variaciones de tipo de cambio, se incrementaron un 11 por ciento. A su vez, en tiendas comparables (netas del efecto de aperturas de nuevos locales), aumentaron un 7 por ciento.
La región de América mostró una mejora bastante moderada, en línea con lo que se observa con otras compañías del sector: las ventas aumentaron un 4% en total y un 1% si se miden las comparables.
En cambio, en Asia-Pacífico, su facturación creció el 27% hasta alcanzar los 238 millones de dólares, si se excluyen las fluctuaciones cambiarias aumentaron un 29% en la región, y en tiendas comprables lo hicieron un 22 por ciento.
Por su parte, sus ganancias por acción mejoraron un 50% interanual hasta los 0.73 dólares y superaron los 0,58 que esperaban los analistas de Wall Street. Esto se debió a la performance de sus ventas, combinadas con mayores márgenes de beneficios y una menor tasa efectiva de impuestos en el triemestre. A esto hay que sumarle que su management incrementó su estimado de lucros para este año desde los 3.50 / 3.60 dólares por papel hasta los 3.65 / 3.75.
Más allá de su buen rendimiento, el dato saliente del trimestre fue el crecimiento de su facturación Asia-Pacífico. En caso de que logre sostenerlo en el tiempo, sus títulos contarían con un poderoso combustible alcista.
Sus acciones habían establecido un soporte por encima de los 73.60 dólares en octubre para, luego, comenzar una recuperación de mediano plazo. Tras su exitoso balance, mostró un gap ascendente hacia su techo del año, y llegó a tocar los 89. Una ruptura de estos máximos, señalaría una reanudación de la subida.
A la baja, en cambio, el primer soporte de corto plazo a tener en cuenta es el de los 86 dólares. Por debajo de allí, otro posible soporte se encuentra en los 83, que funcionaron como resistencia en períodos previos al anuncio de ganancias.
Los niveles de 80.50 y 73.70 dólares han actuado como soportes en los últimos meses, por lo que representan áreas de interés en caso de mayores movimientos descendentes.
Las acciones de Tiffany cotizan a un ratio precio/ganancias (P/E) de 20.10 veces los beneficios estimados para el año próximo, algo demandante en términos de expectativas de expansión, pero que no resultan exageradas en caso de que logre sostener su performance.
Por eso, el valor estimado para sus papeles es de 100 dólares, lo que implica un potencial de crecimiento del 12.18% en comparación con los 89.14 en los que se mueve en la actualidad y se recomienda la colocación de un stop loss por debajo de los 83.
fondos@eleconomista.com.mx