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España, líder mundial en paridad en gestión de fondos
Las gestoras defienden la meritocracia y la diversidad en los equipos de trabajo.
Las mujeres ocupan una posición muy relevante en la industria española de gestión de activos. De acuerdo con un informe elaborado por la firma Citywire, el 27% de los fondos de inversión están administrados por una mujer. El porcentaje tal vez no parezca espectacular, pero resulta que es el más alto del mundo. En Francia, el segundo país con mayor presencia femenina, tan solo llegan al 18%. En un campeón de la paridad de género, como Suecia, las mujeres son solo el 11% entre los gestores de fondos. Y en las grandes plazas financieras, como Estados Unidos, Reino Unido, Irlanda o Luxemburgo, la proporción no llega si quiera al 10%.
¿Cómo es posible? ¿Por qué España, que en otros ámbitos de la incorporación de la mujeres a puestos de influencia está tan retrasada (como es el caso de los consejos de administración o la judicatura), tiene en cambio el prestigio de ser el país del mundo con mayor presencia femenina en la gestión de fondos, una industria que mueve más de 220,000 millones de euros?
Creo que la explicación es que la industria de los fondos de inversión es relativamente joven en España. Empezó su andadura en la década de los 80, lo que coincidió con un periodo de fuerte incorporación de la mujer al mundo laboral. Eso creo que nos ha beneficiado, frente a otros países donde la industria estaba más consolidada .
Quien ofrece esta explicación es Asunción Ortega, presidenta ejecutiva de CaixaBank Asset Management y, probablemente, la persona con más poder en la industria de gestión de activos de España. Ortega está al frente de 164 empleados (el 51% mujeres), que gestionan un volumen de activos que supera los 38,000 millones de euros. Ninguna otra sociedad gestora es tan grande.
Esta directiva no es una recién llegada, ni ocupa su puesto por una cuestión de cuota femenina. Desde hace más de una década dirige el negocio de fondos de inversión de La Caixa, y durante su mandato ha logrado que la entidad acabe superando en activos bajo gestión a los dos grandes gigantes bancarios de España: el grupo Santander y BBVA.
Asunción Ortega valora positivamente el hecho de que las sociedades gestoras españolas sean las que cuentan con una mayor presencia femenina, pero deja muy claro que lo que prima por encima de cualquier otra consideración a la hora de seleccionar al personal es el talento . En el caso de CaixaBank AM, el 36% de los gestores de fondos son mujeres.
Respecto a los problemas de conciliación, considera que las nuevas tecnologías han permitido que estemos más conectados y han facilitado el poder seguir la evolución de los mercados en todo momento . En cuanto a las nuevas generaciones, Ortega confía en que el porcentaje de mujeres seguirá aumentando. Aquí vienen muchos universitarios a hacer prácticas, y hay tantas mujeres como hombres .
La situación de Asunción Ortega no es un caso aislado. La cuarta mayor gestora de fondos de inversión de España, Bankia Fondos, también está dirigida por una mujer: Rocío Eguiraun. En su caso, lleva al frente de la misma (primero en Caja MadridFondos), cerca de 20 años. Esta directiva tiene bajo su responsabilidad la gestión de un patrimonio de cerca de 20.000 millones de euros, entre fondos y planes de pensiones.
Al igual que Ortega, defiende a capa y espada la cultura de la meritocracia en la selección de personal, como la única vía para que la sociedad gestora obtenga buenos resultados. Preguntada sobre si ha sentido algún tipo de discriminación a lo largo de su trayectoria profesional asegura que no, pero ni discriminación negativa, ni positiva .
Eguiraun considera que las mujeres no tienen un sesgo específico, por el hecho de su género, a la hora de gestionar un fondo. Sin embargo, sí que resalta como algo positivo que en un equipo de profesionales de la inversión haya diversidad. Está comprobado que la forma de encarar los retos, de analizar los mercados en todas sus facetas es más completa si incorporamos las opiniones y visiones de hombres y mujeres, o de personas más jóvenes y más maduras, por lo que la mejor forma de conformar un equipo es con diversificación de género .
Lola Solana comparte punto por punto esta reflexión. Esta profesional gestiona desde hace más de una década el Santander Small Caps, especializado en la inversión en compañías de pequeña y mediana capitalización, situando a su fondo entre los mejores del mercado. Por la peculiaridad del vehículo que administra, le ha tocado fajarse con decenas de directores financieros. Es fundamental el contacto directo con los gestores. Conocerles, escucharles, seguir su trayectoria , explica Solana.
La rentabilidad obtenida por su fondo es sobresaliente. En los tres últimos ejercicios mantienen un rendimiento medio anual superior al 12%. También ha sufrido los sinsabores del mercado, como cuando descubrió, con el resto de inversores, la estafa de Gowex ( en cuanto aparecieron las primeras sospechas de que había un fraude ordené a mi equipo vender toda la posición, que afortunadamente era pequeña; pero este tipo de experiencias te hacen aprender mucho ).
Solana defiende con entusiasmo la labor de los gestores de fondos. Nuestras decisiones acaban repercutiendo en el desarrollo de empresas que ayudan a la vida de la gente, con la investigación para combatir enfermedades o la apuesta por las energías renovables. Hay que tratar de desterrar los clichés de que aquí solo se trata de especular y ganar dinero .
Sobre la conciliación, reconoce que no es fácil. Tengo tres hijos, pero como gestora nunca termino de desconectar. Siempre estoy pendiente de mis inversiones, de buscar nuevas ideas. Pero creo que todo se puede compaginar .
Silvia Franco, gestora de renta fija en Gescooperativo, sí que aprecia algunas diferencias entre hombre y mujeres a la hora de gestionar. Creo que somos más prudentes a la hora de asumir riesgos, con una visión más centrada en el largo plazo, pero tampoco hay que generalizar . En su caso, la firma Citywire la ha reconocido como una de las mejores gestoras del país, y ha recibido en varias ocasiones la máxima calificación que puede recibir un gestor de fondos (sea hombre o mujer), la triple A.
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