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¿Funcionará el plan del peso?
Tras las agresivas medidas tomadas por las autoridades financieras de nuestro país para contrarrestar la fuerte volatilidad que ha sufrido el peso, particularmente desde inicios de este año, han surgido muchas preguntas sobre el impacto que podrían tener dichas medidas en los mercados, y si éstas realmente podrán frenar la especulación de que ha sido objeto el peso mexicano.
Tras las agresivas medidas tomadas por las autoridades financieras de nuestro país para contrarrestar la fuerte volatilidad que ha sufrido el peso, particularmente desde inicios de este año, han surgido muchas preguntas sobre el impacto que podrían tener dichas medidas en los mercados, y si éstas realmente podrán frenar la especulación de que ha sido objeto el peso mexicano
El pasado miércoles, el peso llegó casi a niveles de 19 pesos/dólar cuando de pronto, y tras varios anuncios por parte de países miembros de la OPEP, se dio a conocer que se estaba contemplando la posibilidad de que se pudiesen congelar los niveles de producción petrolera a los vistos en el mes de enero.
Los que lideran esta iniciativa son Arabia Saudita y Rusia, principales productores miembros de la OPEP, acompañados por Venezuela y Qatar, quienes después de una serie de reuniones lograron, aparentemente, que Irán se subiera al barco, aunque no ha habido aún declaración oficial de ese país al respecto.
Lo anterior generó un impresionante rally en el precio del oro negro que impactó positivamente a nuestro tipo de cambio para llevarlo a niveles de 18.25 pesos por dólar. Acto seguido, nuestras autoridades financieras salieron para anunciar tres medidas encaminadas a respaldar al peso: incrementar la tasa de referencia en 50 puntos base, suspender las subastas de dólares diarias y hacer un recorte en el presupuesto de gasto por 132,000 millones de pesos, equivalentes a 7.28 billones de dólares.
En cuanto se anunciaron estas medidas, el peso reaccionó con grandes ganancias frente al dólar para llegar a tocar por un instante niveles de 17.98 pesos/dólar y finalmente cerrar en 18.2890 pesos/dólar, lo que significó una apreciación de 3.1% con respecto a su cierre anterior.
Al cierre del viernes, el peso logró ubicarse en los 18.20 pesos/dólar a pesar de las fuertes turbulencias en el mercado petrolero originadas por el dato de inventarios publicado por la Agencia de Información Energética en los Estados Unidos que mostró un incremento de 2.147 millones de barriles, generando, una vez más, presiones bajista para el petróleo.
Y es que el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, dejó muy en claro, el viernes pasado en una entrevista, que la Comisión de Cambios ha quedado en absoluta libertad de intervenir en cualquier momento y con el monto que sea necesario para apoyar al peso, además de estar en posibilidades de subir la tasa de referencia cuando así se requiera, pasando de una estrategia conocida a una sorpresiva, que busca mitigar los ataques especulativos a nuestra moneda, y por ende, prevenir los efectos inflacionarios que eventualmente pueden impactar los precios por las fuertes presiones que ha tenido el peso mexicano.
A pesar de lo anterior, muchos en los mercados se cuestionan si dichas medidas serán suficientes para disminuir la fuerte volatilidad del peso.
Y el problema no es de México, es global. Por un lado está la grave situación europea, en la que los mercados ya están preocupados por la salud financiera de la banca en esas latitudes.
Por el otro, está la situación económica de Asia con China y Japón, donde, por más esfuerzos que hacen sus bancos centrales para reactivar sus economías, éstas simplemente no despegan. En Latinoamérica existen varios focos rojos, como son los casos de Venezuela, Argentina y Brasil; mientras que, en Medio Oriente, la situación con Siria es bastante compleja.
