Lectura 3:00 min
Transparencia, vital para éxito de bonos verdes
El mercado de bonos verdes en México requiere un alto nivel de transparencia en cuanto al uso correcto de los recursos para que llegue a ser exitoso, aseguró Monex.
El mercado de bonos verdes en México requiere un alto nivel de transparencia en cuanto al uso correcto de los recursos para que llegue a ser exitoso, aseguró Monex.
Ayer, Nacional Financiera emitió el primer bono verde en pesos en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), por el que piensa recaudar 2,000 millones de pesos.
Nafin ya había emitido un bono verde en los mercados internacionales en octubre del año pasado por 2,000 millones de dólares, que tuvo una demanda de 2,500 millones de dólares.
Hasta ahora, ninguna empresa privada en México ha emitido alguno de estos instrumentos.
Para Javier Bernal Stoopen, director de Mercado de Dinero y Ventas Institucionales de Grupo Financiero Monex, decir que los riesgos por la emisión de un bono verde no existen es incorrecto.
El directivo comentó que el tema de segregar los recursos para la financiación de estas actividades implica reportes especiales, certificaciones y segundas opiniones por parte de consultores externos que estarán siguiendo al bono a lo largo de su vida, para que el compromiso inicial sobre la utilización de los recursos se dé adecuadamente.
El riesgo es que en un momento dado, estos recursos no se canalizasen como originalmente se expone, pero nosotros creemos que no sólo Nafin, sino cualquier otro que opte por obtener esta certificación de bono verde hará un uso estricto y muy responsable de los recursos , destacó el experto.
Respecto de la colocación del bono verde de Nafin, dijo que el mercado estará buscando poner el precio que corresponda al plazo, al tipo de balance, que en este caso es AAA respaldado por el gobierno federal; el mercado siempre pone el precio. Aquí hay un cuarto componente: es que los recursos se dedicarán de una manera segregada: una transparencia, un nuevo nivel de transparencia para la utilización y canalización de los recursos de estas actividades .
Proceso complejo
Para el especialista, las empresas privadas no se han animado a emitir un instrumento de este tipo debido a que el aspecto de certificar al emisor es un proceso complejo, no es un tema económico; tiene un costo administrativo asociado, pero más allá del costo está la convicción de la empresa o banco de desarrollo por contribuir al cambio climático en México.
Muchas empresas y gobiernos locales que estarán buscando la difusión y buscando promover con las empresas que son potenciales emisores de que se adquiera este compromiso y este interés de certificarse y desde luego financiar actividades de esta naturaleza , añadió.
El ejecutivo no descartó que los grandes corporativos en México, como Cemex y FEMSA, tengan procesos que se pueden etiquetar a este emblema, por lo que no será sorpresa que veamos empresas líderes en sus ramos mandando mensajes claros al mercado del compromiso que tienen las mismas con el cambio climático, no nada más en México, sino a nivel internacional , finalizó.