Lectura 2:00 min
Acciones de gobiernos panistas han sido de simulación: Aparicio
A pesar de que el problema de la falta de rendición de cuentas viene antes de la llegada de PAN al gobierno, éste no hizo mayores esfuerzos por sancionar a funcionarios corruptos, dice el analista.
El PAN no ha sabido combatir la corrupción en el país. A 10 años de su llegada al poder, las acciones emprendidas para acabar con este flagelo han sido débiles e incluso son calificados como una simulación , coinciden especialistas.
El Índice de Percepción de la Corrupción 2010 sitúa a México en el lugar 98 de 178 países, con una calificación de 3.1 cuando la máxima fue de 10.
De acuerdo con Javier Aparicio, profesor del Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE), el problema de la rendición de cuentas y el Estado de Derecho precede a la llegada del PAN, éste sí tiene responsabilidad por no haber hecho mayores esfuerzos y sancionar a funcionarios corruptos.
La PGR podría hacer un esfuerzo más serio para perseguir a los funcionarios corruptos y en México no tenemos suficientes noticias de funcionarios corruptos, ha hecho un esfuerzo débil por perseguir la corrupción , aseguró a El Economista.
Por otra parte, Luis Escobar, investigador del Tecnológico de Monterrey, calificó como una simulación , pues considera: El PAN no acreditó en los hechos el discurso que durante 60 años vendió, de que era un partido diferente al PRI y que ellos eran honestos, al contrario, hemos visto igual o peor corrupción que cuando el PRI estaba en el poder , comentó.
Ambos investigadores coinciden en que el fortalecimiento del Estado de Derecho y las sanciones a funcionarios corruptos son la mejor vía para erradicar este problema.
No es un asunto sólo de transparentar todo, sino de que haya castigos y premios por violar la ley. En México no se castiga suficientemente la violación a la ley, eso produce un Estado de Derecho muy débil y la solución que encuentra la sociedad para aliviar con el gobierno bajo estas condiciones es mediante la corrupción , expuso Aparicio Castillo.
lpadilla@eleconomista.com.mx
