Buscar
Política

Lectura 3:00 min

Casa Blanca acapara la agenda de diputados

Por segunda ocasión consecutiva, el tema de la compra millonaria de la ya famosa Casa Blanca, propiedad de la primera dama del país, dominó en la tribuna de la Cámara de Diputados.

Por segunda ocasión consecutiva, el tema de la compra millonaria de la ya famosa Casa Blanca, propiedad de la primera dama del país, dominó en la tribuna de la Cámara de Diputados.

Apenas iniciada la sesión, el panista Juan Bueno Torio se levantó de su curul y pidió la palabra.

El veracruzano solicitó incluir en el orden del día la discusión de un punto de acuerdo, promovido por su partido, para crear una comisión investigadora sobre el posible conflicto de interés que pudiera haber entre la empresa Higa, del Estado de México, y el Ejecutivo federal, por la compra-venta-financiamiento del citado inmueble, todo vinculado con la cancelación de la licitación del tren rápido México-Querétaro.

Tomás Torres Mercado (PVEM), presidente en turno de la Mesa Directiva, ofreció tramitar la petición.

Acto seguido, Elizabeth Yáñez Robles, correligionaria de Bueno Torio, pidió la palabra para aclarar a los priístas que las críticas a la esposa del presidente Enrique Peña Nieto no tienen que ver con un asunto de carácter sexista al no aceptar que una mujer sea económica y profesionalmente exitosa.

A nadie en este país le importa si la señora (Angélica) Rivera tiene 100 millones de pesos o mil millones de pesos para comprar el Castillo de Chapultepec. No desviemos la atención. El responsable de este problema se llama Enrique Peña Nieto , manifestó Yáñez Robles.

Y ante las aclaraciones de Torres Mercado de que el asunto no estaba a discusión, la panista no interrumpió su alocución y elevó el tono de voz:

No, señor presidente, no me interrumpa. No, señor presidente. No me quite el derecho de expresarme, señor presidente... El señor Enrique Peña Nieto es el que tiene que venir a explicar, rendir cuentas, transparentar y dejar claro que no hay conflicto de intereses, de que la empresa que él benefició durante ocho años, de repente decidió comprar una casa y vendérsela a la presidenta (sic) de la República en módicas mensualidades , increpó Elizabeth Yáñez.

A partir de ahí, los legisladores de la izquierda aprovecharon el uso de la voz para referirse al tema, a cada rato.

Y el PRI volvió a echar a andar su estrategia, instrumentada el pasado jueves, de responder desde la tribuna y desde las curules a gritos a cada una de las acusaciones de la oposición.

rolando.ramos@eleconomista.mx

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí

Noticias Recomendadas

Suscríbete