En el 2011, los muertos no contaron

Este año, el gobierno federal no actualizó la base de datos de fallecimientos ocurridos por presunta rivalidad delincuencial, información que transparentó de enero del 2006 a diciembre del 2010.

La base de datos expone por entidad y municipio el tipo de fallecimientos (ejecuciones, agresiones y enfrentamientos), la edad de quienes murieron, el sexo, el lugar de hallazgo y si hubo mensajes de sus victimarios, pero la información dejó de actualizarse.

Luego de que en enero de este año se publicara dicha información, hubo dos tipos de críticas: quienes aplaudieron el ejercicio de transparencia y quienes manifestaron que las víctimas no debían ser sólo un número.

A raíz de la segunda crítica, el gobierno federal, a petición del presidente Felipe Calderón, inició la recopilación de información para el Registro Nacional de Víctimas de la Violencia, enfocado a los homicidios.

El registro nacional es alimentado por las entidades y la recién creada Procuraduría Social de Atención a Víctimas de Delitos coadyuva en esta labor. No obstante, se desconoce si el registro será transparentado, cuándo se presentará en forma y qué años abarcaría.

Mientras tanto, la base de datos de fallecimientos dejó de ser alimentada pese a que funcionarios del gobierno federal prometieron información periódica y afirmaron que sería de utilidad para los mexicanos.

Dicha información reveló que durante la administración calderonista, el 2010 fue el más violento al registrar 15,273 homicidios vinculados al crimen organizado.

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