Levantan la voz contra la Guardia Nacional

Un grupo de más 500 intelectuales, empresarios, activistas y organizaciones sociales expresaron su rechazo a la creación de la Guardia Nacional como propone el presidente electo Andrés Manuel López Obrador, pues calificaron la iniciativa como “una falsa salida a la crisis de inseguridad por la que atraviesa el país”.

Al acudir a entregar una carta en ese sentido, a la casa de transición, María Elena Morera, presidenta de la asociación Causa en Común, demandó al presidente electo combatir el problema de violencia por la vía civil, a través del fortalecimiento y capacitación de los cuerpos policiales federal, estatales y municipales.

A nombre de 136 organizaciones, hizo un llamado a Obrador para detener la reforma constitucional de la Guardia Nacional y optar por el fortalecimiento de las instituciones civiles de seguridad.

Mediante el escrito, personalidades como la empresaria Marinela Servitje, el analista Rubén Aguilar Valenzuela, el escritor Héctor Aguilar Camín, así como los Colectivos #FiscalíaQueSirva, #SeguridadSinGuerra, México Unido Contra la Delincuencia, Fundar, entre otros, pidieron a López Obrador no crear la Guardia Nacional, y menos promover una reforma constitucional con ese propósito.

Expresaron su incógnita sobre por qué el presidente electo, en campaña y precampaña consideró que había un desgaste de las Fuerzas Armadas en el combate al crimen y se pronunció por incrementar el estado de fuerza de la Policía Federal y fortalecer el desarrollo policial a nivel local.

“Ignorando consideraciones empíricas y políticas fundamentales, desechando la opinión de la Comisión Nacional de Derechos Humanos y de diversos organismos internacionales, el presidente electo y su equipo decidieron optar por una militarización”, se menciona en el escrito.

Expresaron que la idea de crear la Guardia Nacional, bajo el mando directo de la Secretaría de la Defensa Nacional, y de otorgar la totalidad de los mandos operativos locales a miembros de las Fuerzas Armadas, es injusta para la totalidad de los cuerpos policiales del país, porque ellos subsisten en condiciones precarias, incluidos salarios, prestaciones, infraestructura, equipamiento y profesionalización, con regímenes laborales por demás abusivos.

Por el contrario, explica el documento, se debe considerar un proyecto de rescate de la Policía Federal para de ahí conformar un cuerpo nacional de policía, bajo un mando civil y sujeto a las leyes civiles.

“Estamos conscientes de la grave crisis de seguridad en la que nos encontramos y valoramos la labor de las Fuerzas Armadas, pero arraigar esta función, que debe ser temporal y extraordinaria, en el texto constitucional, representa una afrenta a un régimen republicano y democrático que aspira a consolidar sus instituciones civiles, y los derechos y garantías individuales de todos los mexicanos.

“En este sentido, la gravedad de la propuesta militarista no puede exagerarse, pues la preeminencia que se pretende otorgar a las Fuerzas Armadas no contará con contrapesos reales en la frágil institucionalidad que hoy caracteriza al país”, se planteó.

Poder a la Sedena

Con la figura de la Guardia Nacional, que se incluye en el Plan Nacional de Paz y Seguridad del próximo gobierno, México Unido Contra la Delincuencia (MUCD) advierte que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) podría concentrar mucho poder en materia de seguridad, porque estaría bajo su mando operativo.

En entrevista, Pablo Girault Ruiz, consejero de MUCD, consideró que dicha corporación debería estar adscrita a la nueva Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.

“¿Por qué la Guardia Nacional va a estar en el ejército y no la dirige (Alfonso) Durazo?”, cuestionó, e insistió en que, lejos de concentrar estas labores en la Sedena, se tienen que dar incentivos a los policías de la misma forma en que se otorgan a los soldados.

El Ejecutivo “tiene que cumplir con entrenar a la policía, pagarles bien, darles retiro, acceso a vivienda y educación a sus hijos, como lo hacen con el ejército”, expresó.

Desde su óptica, es imposible que la formación de los elementos de esta nueva corporación sea distinta a la de los militares, pues pese a estar compuesta por policías —militar, naval y federal—, la integrarán elementos con formación militar y estarán bajo este tipo de mando.

“Estos policías ya están desplegados hoy en día, lo único que van a hacer es cambiarles el uniforme, pero son los mismos que hoy ya tienen problemas por violaciones a los derechos humanos”, expone.

Responde a organizaciones

Andrés Manuel López Obrador contestó a las organizaciones sociales que no detendrá su plan para reformar la Constitución y crear la Guardia Nacional.

“No, con todo respeto. Tienen ellos sus libertades a salvo para manifestarse. Respeto mucho su derecho a disentir, pero tengo la responsabilidad, no puedo garantizar la paz, la tranquilidad de los mexicanos, si no llevamos a cabo esa reforma constitucional”, aseveró.

En entrevista televisiva, López Obrador dijo que hace falta que esas organizaciones “conozcan más las circunstancias” de la inseguridad que vive el país.

Argumentó que en ese marco, “no hay” otra fuerza —que no sea el Ejército y la Marina— que pueda ocuparse del combate al crimen organizado.

Reiteró que la Policía Federal cuenta con 40,000 elementos, pero sólo 20,000 son elementos de fuerza. Por ello, dijo la Guardia Nacional “va, porque la necesitamos para garantizar la paz de los mexicanos”.

Obrador pidió a las organizaciones “que tengan confianza”.