México carece de conducción política y unidad

Lo que le está faltando a México en la lucha contra los barones de la droga y sus ejércitos de sicarios para recuperar territorios arrebatados a través de la violencia, la intimidación y muerte, es la unidad nacional’’ y lo más importante conducción política’’ independientemente de filiaciones ideológicas o políticas, aseguró Sergio Fajardo.

En entrevista con El Economista, el matemático de profesión y político colombiano, que formó el movimiento cívico-político independiente y luego ocupó en el 2003 la alcaldía de Medellín y cuatro años más tarde transformo la ciudad que fuera bastión de uno de los capos del narcotráfico más crueles, Pablo Escobar Gaviria, enfatizó que es lo que no he visto en México’’.

Luego de participar en el XII Congreso Internacional de Arquitectura Arquine’’ en la ciudad de México, el político sudamericano platicó de cómo fue encauzando las demandas de la población con acciones compartidas entre gobierno-sociedad en búsqueda de la transformación social’’ que requería Medellín, Colombia.

Lo primero fue luchar contra las expresiones de la violencia, el terrorismo que se desató en Medellín hace 30 años por parte del cártel de Medellín, de Pablo Escobar, obligó a implementar medidas de transparencia, educativas, culturales, tecnológicas, creación de colegios, casas de cultura, parques de la ciencia y esparcimiento.

Cuál fue en sentido de esas expresiones, sostuvo el doctor Sergio Fajardo: Los más bello para los más humildes’’. Ahí arrancó el proyecto que dejaba en claro que lo bello no sólo es parte de un sector pudiente o de las organizaciones criminales que deslumbran con su poder económico’’.

Otro factor, fue devolver la dignidad’’ a los habitantes de Medellín, quienes ante la ola de terror, asesinatos y hechos delictivos la perdió a causa de ver desvalorado su sentido humano y capacidad de emprender proyectos de desarrollo personal, comunitario y nacional ante el dolor, muerte y destrucción’’ que provocaron las organizaciones criminales.

Aunque dijo que estos aspectos no deben ser copiados por nuestro país, sí tomar los puntos valiosos para aplicarlos. Lo que podría recoger México de otras experiencias no sólo de Colombia. Mí país también ha tenido su parte transitoria de dificultades’’, añadió.

Algo relevante que estimó el exalcalde de Medellín, es que se debe impulsar la lucha contra la corrupción, porque ésta es la principal base del caldo de cultivo de la violencia e impunidad, y la transparencia es el antídoto de todo lo que enquista la criminalidad.

Al que tiene precio se le encuentra y al que estorba se elimina’’, esa era la primicia de los grupos criminales en Colombia. En México y otros países, no creo que sean diferentes, sino que tienen hilos conductores, consideró Sergio Fajardo.

Un aspecto que lo hace reflexionar sobre lo que está pasando en nuestro país, es que aparte de la nula conducción política, se suma la inexistencia de la separación de poderes, porque se debe transitar a una justicia que no tenga tintes políticos, de esto no se habla aqu풒.

Claro que es importante el fortalecimiento policiaco, las grandes capturas de capos, pero debe ir acompañada con una política social, para que el narcotráfico o crimen organizado no sea una alternativa de vida para los niños, adolescentes y jóvenes’’.

Sobre la participación de empresarios, académicos, organizaciones civiles o no gubernamentales son importantes, pero el político colombiano estimó son igual de frágiles y pueden ser encontradas por los delincuentes’’, pero si no se tiene un liderazgo político no se tiene rumbo’’.

-¿Todos en un solo camino?, se le cuestiona.

Eso es lo que no se habla en México. No lo he escuchado. En Colombia cuando el Presidente en turno llamaba a todas las fuerzas políticas, económicas y sociales, todos iban con el mismo rumbo, porque ese es el camino.

-¿Podría explicar la separación de Poderes, porque aquí los tenemos?

Bueno es que la separación de poderes al enfrentar a los grupos del crimen organizado o narcotráfico, lo elemental es que la justicia no tenga tintes políticos, que sea una aplicación independiente no apegada a ninguna institución, sino a todo el país.

Un embate por el bien de la nación debe ser un esfuerzo de todos, no solo demandas, sino aplicar soluciones, no nada más propuestas, si no cómo se le va a hacer, que es lo esencial en este tipo de acciones contra los grupos criminales, concluyó.

PERFIL: ¿QUIÉN ES SERGIO FAJARDO?

rtorres@eleconomista.com.mx

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