Lectura 2:00 min
Niegan presiones exteriores para Frontera Sur
El gobierno mexicano dijo que el programa no endurece la política migratoria mexicana, sino que ordena los flujos fronterizos del sur.
El gobierno de México implementó el programa Frontera Sur sin presiones por parte de las autoridades de Estados Unidos, afirmó el subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Sergio Alcocer.
En teleconferencia de prensa, dictada desde California, Estados Unidos, donde acompañó al canciller José Antonio Meade Kuribreña a una gira laboral, el subsecretario afirmó que Frontera Sur es una estrategia de respuesta del gobierno nacional para responder al fenómeno migratorio sin que se vea como una respuesta de presión de nadie, sino conociendo que todos tenemos responsabilidad .
Negó que el programa signifique un endurecimiento de la política migratoria mexicana. La palabra correcta es el ordenamiento de los flujos fronterizos en el sur de nuestro país . Precisó que en la frontera de Guatemala y de Belice se registra una cantidad importante de cruces informales; lo que busca esta estrategia es fortalecer los cruces formales, que son 10, más dos que se abrirán próximamente; tener un apoyo de puntos internos de control a través de centros de atención integral al tránsito migratorio; y tener y dotar a los migrantes de las facilidades, pero al mismo tiempo también de las medidas de control, a través de las tarjetas de trabajadores fronterizos o de visitantes regionales .
Con relación a la decisión del gobierno de Texas de asignar un mayor número de agentes estatales a la frontera sur de ese estado, destacó que el gobierno de México ha manifestado su preocupación.
Esta medida, detalló, no conduce a la atención integral que el problema de la migración, muy especialmente el de los menores no acompañados, requiere.
La atención del fenómeno migratorio, manifestó, debe observarse desde una perspectiva regional de largo plazo y basada en los principios de buena vecindad y responsabilidad compartida adoptados por el gobierno federal de Estados Unidos.
La estrategia para responder de manera efectiva y humana a este fenómeno implica la necesaria corresponsabilidad entre países de origen, tránsito y destino de flujos migratorios, externó la Cancillería mexicana.
