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Posiciones de dirección y mando siguen predominando en manos de hombres
Mujeres, con menos presencia en las posiciones de liderazgo y toma de decisiones dentro de la administración pública.
Las instituciones del Gobierno federal han avanzado en la integración de un mayor número de mujeres en sus plantillas laborales, sin embargo, las posiciones de dirección y mando siguen predominantemente en manos de hombres, además de persistir brechas salariales, afirmó la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
En su Estudio sobre la Igualdad de entre Mujeres y Hombres en materia de Puestos y Salarios en la Administración Pública Federal 2017, presentado este martes, la Comisión precisó que se analizaron 49 instituciones federales en noviembre pasado.
De acuerdo con el documento, 53.3 % de los empleados, entonces, en dichas instituciones fueron mujeres, e incluso en cinco de ellas: el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), el Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES), el DIF, el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (INAPAM) y la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia (CONAVIM), la participación de mujeres fue igual o mayor a 60 por ciento.
No obstante, “si se contrasta el porcentaje de mujeres en mandos, con el del total del personal, se aprecia que las mujeres tienen menos presencia en las posiciones de liderazgo y toma de decisiones”, indica el estudio
De acuerdo con el Programa Nacional para la Igualdad de Oportunidades y No Discriminación contra las Mujeres 2013-2018, el objetivo para este año era que al menos 40 % de los puestos de mando dentro de la Administración Pública Federal fueran ocupados por mujeres.
Sin embargo, precisa el estudio de la CNDH, en sólo 29 de las 47 instituciones analizadas se cumplió con dicho presupuesto, mientras que en 18 de las instituciones el porcentaje de mujeres en puestos directivos fue menor a 40 %, en tanto que la Secretaría de la Defensa Nacional y la Secretaría de Marina no se incluyeron en el análisis de las posiciones laborales debido a “razones de confidencialidad”, se precisa en el documento.
Además de las brechas de mando, se aprecia en el estudio que mientras más alto es el cargo, dentro de los altos mandos en las Secretarías de Estado, la presencia de mujeres disminuye, pues mientras en las jefaturas de departamento la presencia de mujeres es de alrededor de 47%, en las subdirecciones y direcciones el porcentaje baja a 37 y en las direcciones generales adjuntas y generales el porcentaje es de 28.5 y 21.9 % respectivamente.
Por otra parte, en materia de salarios la disparidad también se evidenció, ya que en el análisis se encontró que el mayor número de mujeres ocupan las posiciones de menores salarios.
En promedio las brechas salariales entre mujeres y hombres es de 12 % menos, para las primeras, en las Secretarías de Estado y 7 % menos en otras instituciones federales.
Eréndira Cruzvillegas Fuentes, cuarta visitadora de la CNDH apuntó que las razones para la disparidad en los altos mandos en la Administración van desde la persistencia de estereotipos sobre las capacidades de las mujeres, hasta la percepción de las mismas de que los altos mandos son “ámbitos más masculinos”.
A su vez, la secretaria de la Función Pública, Arely Gómez, quien estuvo en la presentación destacó que en comparación con los resultados del estudio de igualdad del 2015, se muestra una tendencia “marcada” hacia la paridad de género tanto salarial como de puestos laborales.