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"Hay que cuidar a la FIL de que no suceda lo que pasó con Bryce”: Poniatowska

Durante el homenaje que se le rindió por sus ochenta años de vida, Elena Poniatowska invitó a la gente a proteger a la feria para que no se vuelva a repetir lo que pasó con la entrega del Premio FIL al escritor peruano.

A Elena Poniatowska se le quiere, y se le quiere bien, en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara. Por eso, el encuentro librero dedicó la tarde del domingo para rendirle un homenaje y entregarle una medalla a la autora de La noche de Tlatelolco por sus 80 años de vida. Y la Poni, como le dicen los que la quieren, también quiere a la feria.

Por eso, durante su homenaje, invitó a los asistentes reunidos en el auditorio Juan Rulfo a cuidar esta feria que es nuestra. Hay que cuidarla de que no le hagan daño , en alusión al nombramiento de Alfredo Bryce Echenique como ganador del Premio FIL y de quien dijo que, en lugar de reconocer que la cultura no está al margen de la ética, exclamó ‘Que se jodan’ .

El homenaje a Poniatowska se dividió en dos partes: la oficial y la divertida. La oficial, como corresponde, fue seria y protocolaria.

Raúl Padilla López, presidente de la FIL, leyó un texto donde calificó a la escritora y periodista como una experta en el difícil arte de la entrevista . Apuntó que México fue el lugar que la vio convertirse en militante de izquierda, periodista, escritora y cineasta y destacó su compromiso con la denuncia del dolor y la búsqueda de la equidad y la justicia . Y cerró: Gracias Elena porque con tu trabajo nos alientas a luchar contra el olvido y el abuso del poder . Acto seguido, Marco Antonio Cortés Guardado, rector de la Universidad de Guadalajara, le colocó una medalla a Poniatowska para dejar constancia del homenaje.

Una vez pasado el protocolo, vino lo demás. Al presidio subieron Jesusa Rodríguez, Rafael Barajas El Fisgón y Juan Villoro, sobre quien recayó la labor de moderar la mesa porque, dijo, a Jesusa este evento le pareció una cosa bonsái. Ella está acostumbrada a moderar actividades ante 400 mil personas en el Zócalo . Y cedió la palabra a El Fisgón, quien dio lectura al relato La princesa selenita, un cuento que le plagió a Walt Disney y con el que contó la biografía de Poniatowska.

Apoyado con dibujos donde aparecieron Elba Esther Gordillo, Díaz Ordaz y Calderón, El Fisgón dijo que los dones de Elena Poniatowska eran la honestidad y la congruencia; alabó el hecho de que Elenita le ha dado voz a las mujeres en un país de machos y dijo que había sido entusiasta de causas perdidas casi todas . El cuento, una adaptación de Cenicienta, arrancó una y otra vez la risa de los asistentes.

Para continuar con las risas, Jesusa Rodríguez dio lectura a un amplio texto donde aprovechó para burlarse de la situación del país, de la inminente llegada de Peña Nieto a la presidencia y, también, de Bryce Echenique: para referirse a Angélica Rivera, quien será la primera dama a partir del próximo sábado, usó un texto de Álvaro Cueva y aclaró que citaba la fuente para que, dijo, no se me acuse de plagio como a Sealtiel Alatriste o algún jurado me dé el próximo año el Premio FIL .

Las risas y los aplausos se sucedieron una y otra vez, hasta que, luego de referirse a esta enorme mujer , Rodríguez cayó en cuenta de que estaba leyendo el texto que preparé para Paty Chapoy y, después de disculparse, dio lectura a El orden del cosmos, un texto-regalo para Poniatowska en el que se detallaba la carta astral de Poniatowska según el calendario azteca y donde se le describía como una estrella, un sabio que escribe, inteligencia, ser luminoso, sacudidora de conciencia , entre muchas otras cosas.

En su intervención, Juan Villoro dijo que había gente que viene de lejos esperando que el país mejore y añadió que eso era lo que había hecho Poniatowska, de quien también apuntó que se trataba de la persona que mejor puede conocer a cualquier otro .

Elogió su labor periodística y literaria al señalar que la había logrado mezclar el periodismo con la exploración de los personajes y dijo que el acto era una celebración de la adelita de las letras mexicanas .

En su breve intervención, Elena Poniatowska hizo el llamado a proteger a la FIL. Enlistó a algunos de los galardonados con el premio Rulfo-FIL y apuntó que sólo en esta edición Alfredo Bryce Echenique vino a exclamar ‘¡Que se jodan!’ .

Concluyó su intervención invitando a la gente a seguir leyendo para ser mejores personas . Una vez concluido el acto, la gente se arremolinó alrededor de Poniatowska para llevarse una fotografía, una firma o decirle alguna palabra. En medio de la gente, la escritora se dio tiempo de abundar su comentario: ?"Hay que cuidar a la FIL de que no suceda lo que pasó ahora con Bryce. Tenemos que cuidarnos de no jodernos, de que no nos vayan a joder.

Él debería de haber renunciado [al galardón]. Un premio que te dan de tan mala gana... así ya no", dijo mientras la gente de protocolo de la FIL luchaba para llevársela.

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